Título: Ahora los padres son ellos
Título original: Little Fockers
Dirección: Paul Weitz
País: Estados Unidos
Año: 2010
Fecha de estreno: 22/12/2010
Duración: 98 min.
Género: Comedia
Calificación: No recomendada para menores de 7 años
Reparto: Jessica Alba, Robert De Niro, Ben Stiller, Owen Wilson, Dustin Hoffman, Teri Polo, Harvey Keitel, Barbra Streisand, Laura Dern, Blythe Danner
Distribuidora: Paramount Pictures
Productora: Paramount Pictures, Universal Pictures, Tribeca Productions, Everyman Pictures, Relativity Media, DW Studios, DW Films
SINOPSIS
Después de diez largos y problemáticos años, Greg Focker (Ben Stiller) parece haberse entendido por fin con su irritable suegro, Jack Byrnes (Robert de Niro). Pero cuando Greg se ve obligado a aceptar un empleo como farmacéutico para superar la crisis económica que sufren tanto él como su esposa, Pam (Teri Polo), Jack volverá a acosarle como en los viejos tiempos. Además, un día se presenta en casa de los Focker el antiguo novio de Pam, Kevin Rawley (Owen Wilson). Ahora Greg tendrá que demostrarle también a él quién es el que lleva los pantalones en casa.
CRÍTICA
Todo el mundo sabe lo que es un chiste, y todos seguro que lo han usado como recurso cómico en alguna ocasión. La gracia que lo sustenta suele basarse en el desconocimiento del tramo final del mismo, donde generalmente se concentran las carcajadas sembradas en el anticipo. El problema viene cuando uno ya lo sabe, porque en su posterior narración va perdiendo parte de su fuerza inicial, hasta que al final corre el riesgo de caer en lo obvio, lo evidente, lo clásico y lo previsible. Con las comedias suele ocurrir lo mismo, y si hablamos de secuelas de un título de éxito eso se nota aún más. Cuando ya llegamos, como es este caso, a una tercera entrega, es muy dificil divertir al espectador como se consiguió en las anteriores películas, y Ahora los padres son ellos peca exactamente de lo que uno se imagina: que ya de entrada se trata de un título innecesario.
Cuando hace 10 años se estrenó Los padres de ella el film sorprendió al encontrar una interesante premisa argumental en el choque de caracteres entre Robert de Niro y Ben Stiller. El argumento era la clásica necesidad de gustar a los suegros de tu pareja y el argumento lo mostraba con unos sketches bastante conseguidos, especialmente por la vis comica demostrada por su pareja protagonista (algo esperable en el caso de Stiller, que venía de éxitos como Algo pasa con Mary, pero más sorprendente en el caso de Robert De Niro, al que uno tenía por un actor "serio"). Sin ser ninguna maravilla la película cumplía a la perfección con su propósito, y generó cuatro años después una secuela (titulada Los padres de él) donde se invertian las tornas (y en donde ya se perdía mucha de la gracia conseguida por la primera entrega) y ahora seis años después de aquella secuela nos llega Ahora los padres son ellos, con la que (espero) la saga quede definitivamente finiquitada.
De entrada tengo que decir que, aunque apropiados, los títulos españoles de la trilogia han obviado la gracia del apellido de él (Focker, traducido como Follen). Asi mismo la segunda entrega perdió chispa pese a contar con actores como Dustin Hoffman y Barbra Streisand, que se sumaban a la saga como los padres Follen del protagonista. Por eso que mi miedo ante esta tercera entrega era que si ya salian los hijos de la pareja, estos se convirtieran en los típicos niños repelentes de este tipo de films, a los que uno con ganas les metería de zurriagazos para ver si espabilan de una vez. Reconozco que ahi me equivoqué... porque para ello ya estan los mayores.
Robert De Niro y Ben Stiller vuelven a repetir lo visto en las anteriores películas, con lo cual me remito al inicio de esta crítica: un chiste la primera vez hace gracia, la tercera vez ya te lo sabes de memoria. En el caso de los cameos de Harvey Keitel y Laura Dern uno se preguntan que objetivo tienen (ninguno) aunque me imagino que para ellos habrá sido sólo un trabajo alimenticio. Otro tanto se puede decir de las episódicas presencias de Barbra Streisand y (sobretodo) de Dustin Hoffman, claramente metidas con calzador dentro de un argumento que nunca va a ninguna parte, ya que no explota los (por otra parte) previsibles giros que nos presenta (y para muestra sirva el personaje de Jessica Alba, mero pretexto de introducir una mujer guapa en la historia que más o menos desestabilize el matrimonio del protagonista. O la chorrada de lo de las sevillanas para el mencionado personaje de Hoffman)
De su éxito en taquilla dependerá el que se haga una nueva entrega, pero si Meet the parents se tradujo como Los padres de ella y Meet the Fockers como Los padres de él, ahora que Little Fockers nos llega como Ahora los padres son ellos... ¿luego que vendrá? Bueno, sea lo que sea desde luego que no hay que fijarse en el plantel actoral porque que sean grandes mitos de la historia del cine no es óbice para que se note (y mucho) que se han metido en un proyecto así sólo por el cheque. Eso si, hay que reconocer que cuando salí del cine no me mostré decepcionado porque el film es TODO lo que uno se imagina que será, para lo bueno (poco) y para lo malo (mucho).
LO MEJOR: Afortunadamente no es muy larga.
LO PEOR: La total perdida de la gracia que demostró la primera entrega y más o menos sostuvo la segunda.
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