viernes, 15 de marzo de 2019

SPIDERWOMAN: CIVIL WAR II y TÁCTICAS INTIMIDATORIAS (reseñas)

Hacía ya bastante tiempo que me había leido el último volumen de la Spiderwoman de Dennis Hopeless, pero más o menos ya recordaba tanto como se había quedado la situación así como los personajes principales que rodeaban a Spiderwoman. Este cuarto tomo incluye los números 8 al 12 americanos, en el que los hechos principales son a cuenta del cruce con el evento Civil War II, en el que la protagonista juega un papel un tanto colateral, más que nada por la relación que la une con la Capitana Marvel (lider de uno de los frentes de dicho evento)

Pero dicho cruce, que ocupa los tres números centrales de este tomo,  y que más o menos sería la comprobación que lleva a cabo Jessica Drew (Spiderwoman) de las supuestas premoniciones del inhumano Ulysses por todo el tema de la justicia preventiva en la que estaba centrada Civil War II (lo que la llevará a una agria discusión con la Capitana Marvel) tiene un prólogo así como un epílogo bastante acertados. En el primero vemos a Jessica combinando esa nueva condición suya de madre soltera con su trabajo, centrado en este número en un combate contra Tiburón-Tigre, mientras que en el número final vemos como lo que tendría que ser un agradable día de playa (y descanso) para ella, su niño pequeño y su ayudante Puercoespín se traduce en una inesperada confrontación con el Hombre de Arena que finalmente se resuelve de forma satisfactoria.

El resultado final es un comic tremendamente entretenido que sabe combinar muy bien la acción con la comedia, siendo lo más divertido el contraste de la nueva condición de Jessica como madre soltera y el hecho de que ella sigue ejerciendo su profesión. Con unos personajes bien definidos y bastante bien desarrollados no estariamos ante una obra cumbre pero sin duda si ante uno de esos comics que una vez leidos te dejan con la satisfacción de haber pasado un buen rato con ellos, ya que tiene un correcto equilibrio entre su guión y su apartado gráfico.
Lo bueno de la situación es que aunque he tardado en leer estos dos tomos de Spiderwoman, he tenido la suerte de poder disfrutarlos seguidos, pero dejándome al final con una sensación agridulce porque si bien me lo he pasado muy bien leyéndolos, en el caso de este que lleva por título Tácticas intimidatorias (y que justo continua al reseñado arriba de Civil War II) estamos ante el último de la serie, lo que me deja con la incógnita de la evolución de Jessica y todo lo que la rodea, sobretodo a raiz de lo que sucede aqui.

Aunque fuera posterior, en mi caso yo conocí antes al Duende que al Duende Verde, por lo que me decanto más hacia el primero en cuanto a aspecto, aunque el segundo bajo la máscara tenga más matices. Por eso que fuera dicho villano el contrincante de esta última entrega me ayudó a sobrellevar esa incógnita antes citada sobre el futuro del personaje, ya que Dennis Hopeless ha conseguido llevarla más allá de lo que su simple función como superheroína requiere, logrando plantearla de una manera humana, creible y tangible para el lector.

Tengo que admitir que en el fondo me sentía muy identificado con el personaje de Roger Gocking, el (en un inicio) villano Puercoespín que luego se reformó, pasando a ayudar a Jessica en la crianza de su bebé. Sus buenas intenciones se hacen patentes en todo lo que sucede en esta última entrega, cuando decide finiquitar su franquicia de villano con el Duende, lo cual no saldrá del todo como él esperaba y llevará a Spiderwoman a tener que meter baza en el asunto. Sin desvelar nada para el que aún no se lo haya leído, tengo que admitir que en este arco argumental disfruté con todo lo que plantean (para lo bueno y para lo malo), cerrando la colección un último número donde una fiesta lleva a Jessica Drew a mostrar ante sus colegas superhéroes que ya es una sensata mujer de familia, alejada de ciertos "estereotipos" que la habian acompañado hasta ese momento.

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