Dibujo: Jae Lee
Entintado: Bob Wiacek, Jae Lee, Jeff Albrecht
Color: Glynis Oliver, Pat Garrahy, Dana Mooreshead
Incluye los comics USA Namor 26 al 35
SINOPSIS
Las profundidades se abrieron, estremecidas y sucias por la mancha de una maldad antigua. Los muertos sin perdón se agitaron en su tumba dudosa, movieron los huesos, desenvainaron las espadas. El antiguo rey oscuro ordenó tocar la trompeta del fin del mundo y miró hacia Atlantis. Y, de pronto, el principe Namor, El Hijo Vengador, el auténtico Hombre Submarino, vio su imperio asediado por las pesadillas de la infancia, por el horror llegado desde el amanecer de los tiempos... y se aprestó a librar la batalla por la que había nacido.
COMENTARIO
En ocasiones se intenta romper el estereotipo de un personaje cambiando su aspecto habitual, como demuestra en este tomo que el Namor que aqui aparece sea más parecido a Lobezno que al clásico Príncipe de Atlantis por todos conocido. Por lo demás, los capítulos aqui incluidos se podrian dividir en dos partes, una que sucede en la tierra y con claras connotaciones ecologistas, y una segunda ya en el fondo del mar y con Namor poniendo orden entre su pueblo natal. De ambas me resultó más entretenida la primera que la segunda, aunque el resultado global es correcto. Eso si, el dibujo (muy típico de los noventa) es en ocasiones tan exagerado (sobretodo en las fisonomias) que roza el esperpento.
CALIFICACIÓN: 6/10
Las profundidades se abrieron, estremecidas y sucias por la mancha de una maldad antigua. Los muertos sin perdón se agitaron en su tumba dudosa, movieron los huesos, desenvainaron las espadas. El antiguo rey oscuro ordenó tocar la trompeta del fin del mundo y miró hacia Atlantis. Y, de pronto, el principe Namor, El Hijo Vengador, el auténtico Hombre Submarino, vio su imperio asediado por las pesadillas de la infancia, por el horror llegado desde el amanecer de los tiempos... y se aprestó a librar la batalla por la que había nacido.
COMENTARIO
En ocasiones se intenta romper el estereotipo de un personaje cambiando su aspecto habitual, como demuestra en este tomo que el Namor que aqui aparece sea más parecido a Lobezno que al clásico Príncipe de Atlantis por todos conocido. Por lo demás, los capítulos aqui incluidos se podrian dividir en dos partes, una que sucede en la tierra y con claras connotaciones ecologistas, y una segunda ya en el fondo del mar y con Namor poniendo orden entre su pueblo natal. De ambas me resultó más entretenida la primera que la segunda, aunque el resultado global es correcto. Eso si, el dibujo (muy típico de los noventa) es en ocasiones tan exagerado (sobretodo en las fisonomias) que roza el esperpento.
CALIFICACIÓN: 6/10
1 comentario:
Pues el dibujo es de Jae Lee, curioso como puede evolucionar un dibujante.
Publicar un comentario