lunes, 17 de julio de 2006

George Bush contra la televisión obscena

El Gobierno estadounidense ha declarado oficialmente la guerra al lenguaje blasfemo y a los desnudos en televisión.

A partir de ahora, cualquier emisora televisiva que no censure tacos o cuerpos ligeros de ropa deberá pagar 325.000 dólares de multa, 10 veces más de lo que tenían que abonar hasta ahora. Estas nuevas medidas para mantener una televisión limpia, que afectan incluso a series tan mayoritarias como Mujeres desesperadas o Friends, fueron aprobadas el mes pasado por el presidente George W. Bush ante la satisfacción generalizada de los grupos religiosos conservadores, que habían intensificado su presión sobre la Casa Blanca desde que la cantante Janet Jackson mostró uno de sus pezones durante su actuación en la Superbowl del año 2004.

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