martes, 16 de enero de 2007

CLÁSICOS DEL SUSPENSE EC # 7

Incluye los comics Shock Suspenstories 7 a 12

SINOPSIS

El septimo número de Clásicos del Suspense continúa con la publicación, por primera vez en España, de la revista Shock SuspenStories. En este volumen destacan la adaptación del relato corto de Ray Bradbury El juego de octubre por parte de Al Feldstein y Jack Kamen, uno de los momentos cumbre del estilo EC, y la incorporación del talento artístico de Reed Crandall a la larga lista de dibujantes que definieron una forma de hacer historietas que aún continúa. Bill Gaines, Wally Wood, Joe Orlando, George Evans, Al Williamson y Johnny Craig siguen demostrando, medio siglo después de su publicación original, la vigencia de sus historias.

RESEÑA

Séptimo número de la colección dedicada a los títulos de suspense de la editorial EC, de la que ya me leí los anteriores seis números de la biblioteca antes de que abriera este blog (y de ahí que no encontreis referencias anteriores de ello). Al igual que los tomos previos, las historias aquí incluidas tendrían bastante puntos en común con las historias de terror que hicieron famosa a la editorial EC, lo que pasa que aquí sin el elemento fantástico, aunque coincidiendo mayoritariamente o bien en los elementos casuales (como por ejemplo la última historia de este tomo) o bien en la justicia contra los amantes infieles (algo bastante clásico en estas historias, del que el ejemplo más claro en este tomo sería una de las historias de ciencia-ficción).

Eso si, dos historias destacaron para mi sobremanera, no sólo por lo angustioso de las mismas sino porque eso aún se da actualmente en el mundo, cinco décadas después. Me refiero a "El mono" y "El secuestrador", la primera acerca de los efectos perniciosos de la droga y como pueden destruir la vida de una persona, y la segunda un claro ejemplo del tráfico de niños.

CALIFICACIÓN: ·····

LO MEJOR: Las historias, todas ellas breves, sencillas y muy entretenidas (y con algunas bastante destacables, como las que cito arriba).

LO PEOR: Nada, quizás alguna reiteración en aspectos argumentales.

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