FICHA TÉCNICA
Título original: Untraceable
Dirección: Gregory Hoblit.
País: USA.
Año: 2008.
Género: Thriller.
Interpretación: Diane Lane (Jennifer Marsh), Billy Burke, Colin Hanks, Joseph Cross, Mary Beth Hurt.
Guión: Robert Fyvolent, Mark R. Brinker y Allison Burnett.
Producción: Steven Pearl, Andy Cohen, Tom Rosenberg, Gary Lucchesi y Hawk Koch.
Música: Christopher Young.
Fotografía: Anastas Michos.
Diseño de producción: Paul Eads.
Duración: 100 minutos.
Estreno en España: 4 de abril del 2008
SINOPSIS
El FBI cuenta con un departamento que se dedica únicamente a investigar y perseguir a los delincuentes que actúan en Internet. La agente especial Jennifer Marsh (Diane Lane) creía haberlo visto todo... hasta ahora. Un depredador cibernético cuelga torturas y asesinatos en su página web. El destino de sus prisioneros depende del público: cuantas más visitas registre su página web, más deprisa morirán las víctimas. Cuando el juego del gato y el ratón se convierte en algo personal, Jennifer y su equipo deberán lanzarse a una carrera contrarreloj para encontrar a este asesino.
CRÍTICA
Tengo que reconocer antes de nada que mis expectativas ante una película así estaban muy bajas. No es por nada pero es que su director (Gregory Hoblit) es el típico artesano de Hollywood, del que te puedes esperar como mucho un producto entretenido y para de contar (y no es que abunden precisamente en su filmografía). Por eso que con unas bajas expectativas puede resultar que hasta te entretengas y todo... que fue lo que me pasó a mi.
Eso si, la película no deja de ser un film correcto como hay tantos otros, pero pese a que su sinopsis y las imágenes previas que había visto me hacían temer una película del montón, como mínimo tengo que reconocer que al menos está rodada con la suficiente corrección como para mantener el interés del espectador, si bien poco de lo que este verá en pantalla será novedoso. De hecho lo más sorprendente del relato vendría en su planteamiento, con esa página web donde cuanta más gente entre, más rápido muere la persona a la que están torturando. Salvo eso el resto se mueve por terrenos conocidos para el que esté curtido en thrillers de todo tipo (las referencias visuales y estéticas van desde El silencio de los corderos hasta Saw pasando por Seven y tantos otros films de estética similar a los citados).
Lo que pasa que tal y como ocurre con los recientes remakes de peliculas de terror japonesas (que también se mueven por lugares comunes a films previos) todo depende de que el conjunto final esté rodado con el mínimo interés y no aburra (aunque no sorprenda mucho), y ahí si que tengo que reconocer que Gregory Hoblit cumple la papeleta, con una película que es lo que es (no engaña a nadie), que no innova en nada (lo de la web sería lo único moderadamente más inédito) pero que se deja ver bien si uno no pone muchas expectativas en el resultado final (que no dejaría de ser una especie de variante de tantos films previos con psicópata por en medio y policía que lo persigue). En cuanto a los actores, citar la corrección de todos ellos (no hacen nada que en el fondo no pudiera haber hecho cualquier otro, si bien ninguno de ellos molesta) destacando sobre todos ellos la protagonista, una Diane Lane sin duda alguna mejor actriz de lo que productos como este dejan entrever en ella.
LO MEJOR: Es entretenida (gracias sobretodo a su escueta duración de 100 minutos y a su protagonista), siempre y cuando el espectador no ponga muchas expectativas en una película que no aburre pero que tampoco se puede decir que sea especialmente destacable.
LO PEOR: La estética visual de la película, que recuerda a multitud de thrillers previos (El silencio de los corderos, Seven, Saw,...)
Título original: Untraceable
Dirección: Gregory Hoblit.
País: USA.
Año: 2008.
Género: Thriller.
Interpretación: Diane Lane (Jennifer Marsh), Billy Burke, Colin Hanks, Joseph Cross, Mary Beth Hurt.
Guión: Robert Fyvolent, Mark R. Brinker y Allison Burnett.
Producción: Steven Pearl, Andy Cohen, Tom Rosenberg, Gary Lucchesi y Hawk Koch.
Música: Christopher Young.
Fotografía: Anastas Michos.
Diseño de producción: Paul Eads.
Duración: 100 minutos.
Estreno en España: 4 de abril del 2008
SINOPSIS
El FBI cuenta con un departamento que se dedica únicamente a investigar y perseguir a los delincuentes que actúan en Internet. La agente especial Jennifer Marsh (Diane Lane) creía haberlo visto todo... hasta ahora. Un depredador cibernético cuelga torturas y asesinatos en su página web. El destino de sus prisioneros depende del público: cuantas más visitas registre su página web, más deprisa morirán las víctimas. Cuando el juego del gato y el ratón se convierte en algo personal, Jennifer y su equipo deberán lanzarse a una carrera contrarreloj para encontrar a este asesino.
CRÍTICA
Tengo que reconocer antes de nada que mis expectativas ante una película así estaban muy bajas. No es por nada pero es que su director (Gregory Hoblit) es el típico artesano de Hollywood, del que te puedes esperar como mucho un producto entretenido y para de contar (y no es que abunden precisamente en su filmografía). Por eso que con unas bajas expectativas puede resultar que hasta te entretengas y todo... que fue lo que me pasó a mi.
Eso si, la película no deja de ser un film correcto como hay tantos otros, pero pese a que su sinopsis y las imágenes previas que había visto me hacían temer una película del montón, como mínimo tengo que reconocer que al menos está rodada con la suficiente corrección como para mantener el interés del espectador, si bien poco de lo que este verá en pantalla será novedoso. De hecho lo más sorprendente del relato vendría en su planteamiento, con esa página web donde cuanta más gente entre, más rápido muere la persona a la que están torturando. Salvo eso el resto se mueve por terrenos conocidos para el que esté curtido en thrillers de todo tipo (las referencias visuales y estéticas van desde El silencio de los corderos hasta Saw pasando por Seven y tantos otros films de estética similar a los citados).
Lo que pasa que tal y como ocurre con los recientes remakes de peliculas de terror japonesas (que también se mueven por lugares comunes a films previos) todo depende de que el conjunto final esté rodado con el mínimo interés y no aburra (aunque no sorprenda mucho), y ahí si que tengo que reconocer que Gregory Hoblit cumple la papeleta, con una película que es lo que es (no engaña a nadie), que no innova en nada (lo de la web sería lo único moderadamente más inédito) pero que se deja ver bien si uno no pone muchas expectativas en el resultado final (que no dejaría de ser una especie de variante de tantos films previos con psicópata por en medio y policía que lo persigue). En cuanto a los actores, citar la corrección de todos ellos (no hacen nada que en el fondo no pudiera haber hecho cualquier otro, si bien ninguno de ellos molesta) destacando sobre todos ellos la protagonista, una Diane Lane sin duda alguna mejor actriz de lo que productos como este dejan entrever en ella.
LO MEJOR: Es entretenida (gracias sobretodo a su escueta duración de 100 minutos y a su protagonista), siempre y cuando el espectador no ponga muchas expectativas en una película que no aburre pero que tampoco se puede decir que sea especialmente destacable.
LO PEOR: La estética visual de la película, que recuerda a multitud de thrillers previos (El silencio de los corderos, Seven, Saw,...)