Título: Wall Street: El dinero nunca duerme
Título original: Wall Street: Money never sleeps
Dirección: Oliver Stone
País: Estados Unidos
Año: 2010
Fecha de estreno: 08/10/2010
Duración: 131 min.
Género: Drama
Calificación: No recomendada para menores de 7 años
Reparto: Carey Mulligan, Shia LaBeouf, Charlie Sheen, Michael Douglas, Josh Brolin, Susan Sarandon, Martin Sheen, Frank Langella, Vanessa Ferlito, Natalie Morales
Distribuidora: 20th Century Fox
Productora: Edward R. Pressman Film
SINOPSIS
Mientras la economía mundial se encuentra al borde del colapso, el joven 'brooker' Jacob Moore (Shia LaBeouf) se entera de que su mentor se ha suicidado al ser acusado de una estafa. Para vengar su honor, Jacob pide ayuda al siniestro Gordon Gekko (Michael Douglas), que ha pasado 20 años en la cárcel y, en principio, no desea volver ser protagonista en el mercado bursátil de Wall Street. Sin embargo, Gordon sabe que la única manera de recuperar el afecto de su hija Winnie (Carey Mulligan) será accediendo a la petición de Jacob.
CRÍTICA
Esta tardia secuela del film Wall Street tiene un esquema argumental similar al de Terminator 2 (al menos en sus aspectos más básicos). Con esto me vengo a referir que el argumento vendría a ser una actualización de lo mismo que nos contaron en 1987 en la película original; y al igual que en el film de Cameron, el que entonces era villano se convierte ahora en ¿héroe? de la función. El nuevo joven e ¿inocente? protagonista que acompañará a Gekko pasa a ser un Shia LaBeouf que simplemente cumple su papel con corrección pero sin sorpresas destacables.
Con semejante base pensareis que estamos ante un vehículo de lucimiento para Michael Douglas, algo no muy alejado de la realidad. Pero mi comparación con Terminator podría continuar, ya que si Schwarzenegger fue el actor perfecto para aquel papel, aqui también nos queda demostrado que Michael Douglas ES Gondon Gekko, haciendo suyo de nuevo el personaje por el que ganó un Oscar.
El nuevo villano está a cargo de Josh Brolin, si bien nunca acaba de imponer la supuesta vileza de su personaje. Ahora que peor lo tiene Susan Sarandon, cuya presencia es tan testimonial como innecesaria. Aunque es la propia película la que peca de una excesiva dilatación temporal, que provoca graves altibajos a lo largo de sus poco más de dos horas de duración, no siendo el entretenimiento mínimo que uno espera en estas circunstancias.
Para el anecdotario quedaría el cameo que realiza Charlie Sheen de su personaje de la primera entrega, si bien no aporta nada más que un guiño al espectador veterano que haya visto el film anterior. Y pese a que el director Oliver Stone da su opinión sobre la actual crisis con esta película, cualquier posible diatriba queda eclipsada por un final claramente acomodaticio y conservador.
LO MEJOR: El actor Michael Douglas, que hace suyo un personaje al que nadie se imagina con otro rostro que no sea el suyo.
LO PEOR: Se deja ver pero entretiene a ratos y demuestra que la garra narrativa de su director se quedó en el pasado.
2 comentarios:
Resumiendo, que mejor ver la película original.
A mi la película me gustó y para nada se me hizo larga. Stone ha perdido mala leche en su discurso, pero nos cuenta un buen chiste o muy malo. Ante estos tiempos lo mejor es creer en la bondad de la gente.
Y visualmente resulta espectacular,
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