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jueves, 1 de mayo de 2025

ESO NO ESTABA EN MI LIBRO DE CINE DE TERROR (reseña)

Bajo el sugerente título de Eso no estaba en mi libro de cine de terror, mi más reciente lectura de biblioteca ha sido este ensayo del crítico Antonio Míguez Santa Cruz. Se trata de una obra bastante destacable donde el autor desvela multitud de curiosidades sobre dos conceptos tan intrínsecamente ligados como son el cine y el terror. Y esto no sería un simple comentario llamativo, sino una verdadera certeza, a tenor de cómo reaccionaron los primeros espectadores del cinematógrafo de los hermanos Lumiere, pensando que ese tren que veían en pantalla los iba a arrollar.
 
Dentro de la multitud de hechos que se citan hay para todos los gustos: que Conrad Veidt en la película de 1928 El hombre que ríe fue quien inspiró a Bob Kane, Bill Finger y Jerry Robinson para crear al Joker de Batman, que Ed Wood, calificado como el peor director de la historia, se travestía y su cine inspiró la popular saga de zombis Resident Evil, o que Stanley Kubrick estuvo a punto de dirigir El exorcista, hecho este que admito que desconocía. 

Relacionado con esto último, y como cité en mi reciente reseña de Las casas de los impíos, en la década de los setenta y principios de los ochenta hubo un auge de todo lo relacionado con el demonio, lo que en las pantallas de cine tuvo su cenit con El exorcista, título básico del que aún se nutre cualquier nueva película que toque el tema (ya que como cita el propio autor en la página 128, "el subgénero de posesiones y exorcismos se limitó a autoplagiarse hasta la extenuación"). De todas maneras el responsable de este libro se permite exponer una curiosa y extravagante teoría conforme El exorcista 2 (para él mejor de lo que muchos dicen) y Apocalipsis Now comparten un esquema de guion similar. Y desde luego uno se queda con la curiosidad de que tal hubiera sido El exorcista dirigido por Stanley Kubrick, cuyas ideas diferían mucho de las que al final tomó William Friedkin.
 
Los zombis de George A.Romero sirven para realizar un análisis sobre la segregación racial (en el caso del film inaugural de 1968) o el capitalismo (en el caso de su primera secuela de 1978, titulada por estas tierras con un genérico Zombi por el original Dawn of the dead). También hay hueco en estas páginas para el subgénero de animales peligrosos que se desató tras el Tiburón de Steven Spielberg, donde la imaginación dio para gran cantidad de bestias acechantes, que iban de lo inquietante a lo vergonzoso, según los medios de los que dispusieran sus responsables.
 
El capítulo titulado De mascaras y cuchillos está dedicado al slasher caracterizado por ambos elementos, nacido en los setenta y más popular en los ochenta, donde lo mismo entran el Jason Voorhees de la saga Viernes 13 (portada de este libro, aunque la máscara que lo caracteriza no empezó a usarla hasta su tercera entrega) que el Michael Myers de Halloween (cuya máscara en origen era del Capitán Kirk de Star Trek, retocada y pintada de blanco para darle el aspecto que se ve en pantalla), con especial mención a su director, John Carpenter.
 
Otras variantes del terror también citadas en esta obra son por ejemplo el "metraje encontrado" o "found footage", si bien dentro de esta variante el mayor (y casi único) éxito fue La maldición de la bruja de Blair en 1999, beneficiada por una campaña de marketing bastante ingeniosa. También hay mención para el clásico Alien y la multitud de sucedáneos que salieron a rebufo de su éxito, así como algunos subproductos de videoclub provenientes de Italia como Alien 2: Sobre la tierra o Terminator 2 (Shocking Dark), ambos previos a las que sí fueron secuelas oficiales.
 
No podía quedar fuera el cine japonés, donde se analiza toda la época de esplendor que vivió  con sus fantasmas de pelo largo, así como un repaso al auge de los vampiros (citando la emblemática Drácula de Bram Stoker dirigida por Francis Ford Coppola) y los hombres lobo (con ejemplos específicos como Un hombre lobo americano en Londres, cuya transformación a cargo de Rick Baker sigue siendo un clásico del género). Y esto es apenas un esbozo de un libro ilustrado con una buena cantidad de fotogramas de algunas de las películas mencionadas.
 
En resumidas cuentas Eso no estaba en mi libro de cine de terror es un amplio y somero repaso por las diferentes etapas por las que ha pasado este género cinematográfico desde sus mismos orígenes, donde no solo tienen cabida los títulos más emblemáticos, sino muchos otros más desconocidos para el gran público. Sin duda alguna una obra amplia y rigurosa, muy recomendable para todos los cinéfilos empedernidos, cuya lectura se hace además tan provechosa como entretenida.
 
CALIFICACIÓN: 4,5/5 (Excelente)

viernes, 14 de octubre de 2022

CUANDO NACEN LOS MONSTRUOS / WILL / TREN BALA (reseñas-cine)

CUANDO NACEN LOS MONSTRUOS

Cuando un libro titulado Como nacen los monstruos (y con el subtítulo de Mitos del cine de terror) tiene una portada TAN LLAMATIVA sin duda alguna tenía que llamarme la atención cuando entrara en la biblioteca, como así ha ocurrido. Muchas veces reseñando comics he dicho que el apartado gráfico es muy importante para mi, y aunque esto es un libro podriamos decirlo igual, porque en el interior el análisis de los 25 films seleccionados está acompañado de ilustraciones de portada y cierre de cada película realizadas por Fernando Vicente, responsable del apartado visual de esta obra con unos resultados realmente notables. En cuanto a las reseñas es Alberto Gil quien se encarga de ellas, en una labor digna donde respeta los spoilers de las cintas seleccionadas (por si alguna permanece inédita para algún lector), que luego tienen su desglose (con las notas) en el apartado final de este libro. Con un ameno y exhaustivo repaso a la gestación de cada título seleccionado, lo que se pretende no es un antologia del tema (en el que siempre se puede echar en falta algún título o monstruo) sino la descripción de unos films que han hecho icónicos a sus personajes.

WILL

A principios de este 2022 Will Smith se hizo "más" famoso por el tortazo que le dió a Chris Rock en los Oscars que por el hecho de ganar él al final uno. Pero antes de eso, a finales del 2021, se editó una autobiografía del polifacético artista (con la ayuda del escritor Mark Manson) que llegó hace unos meses al catálogo de las bibliotecas, y tras esperar mi turno por fin me he leido. Resulta un relativo desahogo para Will Smith, porque muchos lo asociamos primero con la serie que le dió fama (El príncipe de Bel-Air) y luego con sus personajes en multitud de films taquilleros, pero estamos ante el ejemplo de una persona que también tiene su lado negativo (con violencia de género, acoso escolar, traumas, adicciones, depresiones y problemas de todo tipo) que desglosa en esta amena autobiografía, que permite acercarnos a la persona que es más allá del personaje que nos ha vendido. Estariamos por tanto ante un libro que bien puede considerarse de autoayuda, porque Smith lo enfoca para que no pensemos que por tenerlo todo (como creia él) se es más feliz, en la concrección de ese dicho popular que dice "el dinero no da la felicidad" (aunque digo yo que algo ayudará...)

TREN BALA

El pasado agosto ví la película Bullet train, que sin ser tampoco ninguna maravilla si que probablemente sea una de las más entretenidas que he visto este año, y aunque podía parecer una historia realizada directamente para la pantalla, estaba basada en la novela homónima (Tren Bala en su traducción) de Kotaro Isaka, que tras esperar mi turno por fin he podido leerme de la biblioteca. Esta obra data de 2010 y al leerla enseguida te das cuenta de todo lo que la película antes citada ha occidentalizado esta historia, con resultados más o menos satisfactorios (digamos que sería más o menos fiel ya que la esencia original la conserva) aunque haciendo ciertos cambios sustanciales (evidente por ejemplo en los personajes que viven o mueren según el libro y/o la película), algo que se hace muy evidente en el tramo final, ya que el film toma unos derroteros más espectaculares, mientras que la novela desarrolla más a los personajes y engarza mejor las diferentes tramas que han llevado hasta su conclusión. Sin duda alguna es una novela atractiva, ágil y bastante recomendable, se haya visto o no su adaptación en película, para pasar un rato entretenido.