FICHA TÉCNICA
Título: INDIANA JONES Y EL REINO DE LA CALAVERA DE CRISTAL
Título original: Indiana Jones and the Kingdom of the Crystal Skull
Dirección: Steven Spielberg
País: Estados Unidos
Año: 2008
Duración: 123 min.
Género: Aventura
Reparto: Harrison Ford, John Hurt, Cate Blanchett, Jim Broadbent, Shia LaBeouf, Karen Allen, Ray Winstone, Andrew Divoff, Pavel Lychnikoff, Igor Jijikine, Alan Dale, Joel Stoffer, David LaVera
Guión: George Lucas, David Koepp, Jeff Nathanson, Philip Kaufman
Distribuidora: Paramount
Productora: Amblin Entertainment, Lucasfilm, Paramount Pictures, Santo Domingo Films
SINOPSIS
La última aventura de Indiana Jones empieza en el desierto del suroeste Estados Unidos en 1957, en plena Guerra Fría. Indy y su amigo Mac (Ray Winstone) acabar de escapar por los pelos de las garras de unos infames agentes soviéticos en un remoto aeropuerto.
El profesor Jones regresa a casa y se entera de que las cosas van de mal en peor. Su mejor amigo, el decano de la Universidad (Jim Broadbent), le dice que muchos sospechan de las últimas actuaciones de Indy y que el gobierno presiona a la Universidad para que le despidan. Indiana, a punto de irse, conoce a un joven rebelde llamado Mutt (Shia LaBeouf), que le propone un trato. Si el arqueólogo le ayuda a resolver un problema personal, podría hacer uno de los descubrimientos más espectaculares de la historia; se trata de la Calavera de Cristal de Akator, un objeto legendario que despierta la fascinación, la superstición y el miedo.
CRÍTICA
En los últimos años hemos vivido en las pantallas de cine el retorno de viejos conocidos, todos ellos héroes de los años ochenta. Por un lado Stallone retomó sus personajes de Rocky y Rambo en dos películas que (para mi sorpresa) resultaron ser mejores de lo que uno podía esperar. Luego vino el turno de John McClane (Bruce Willis) en una Jungla 4.0 que no sólo perdía respecto a la trilogía original por tener una calificación moral apta para menores, sino porque encima ponían al protagonista (con más de 50 años) realizando unas proezas más propias de Misión Imposible que de un hombre de su edad.
Si ya me resultó poco creíble lo que hacía Bruce Willis en la citada Jungla 4.0 peor me imaginaba yo a Harrison Ford volviendo a ser Indiana Jones con la edad ya de jubilarse. Pero curiosamente su vuelta a uno de los personajes más emblemáticos de su filmografía se salda, al menos en lo que se refiere a su actuación, con un éxito total, ya que sin duda alguna ÉL ES INDIANA JONES y sólo hace falta un leve gesto o una simple mirada para darnos cuenta de que volvemos a tener delante a un mito del cine.
El problema está en la película en si, y no digo esto porque no me haya gustado ya que me ha parecido muy entretenida y mucho mejor de lo esperado justamente por los riesgos que ha corrido. Y es que al personaje lo tenemos en la memoria colectiva principalmente por la primera y tercera película, las mejores de la saga y las que marcaron los cánones que ha seguido el cine de aventuras desde entonces (basta citar el ejemplo de La Momia, que también esta temporada estrena nueva entrega). Ya sabemos que cuando una cosa tiene éxito, normalmente se repite la misma estructura una y otra vez (por ejemplo las películas con asesino en serie, todas con esquema más o menos mimético entre si) con lo cual una nueva entrega de Indiana Jones podía haber optado por hacerle buscar otro elemento místico-religioso mientras era perseguido por los nazis. Pero han hecho otra cosa.
Si Indy nació en los ochenta como homenaje a los seriales de aventuras de los años 30 y 40, su retorno cinematográfico en los inicios del siglo XXI se decanta por homenajear al cine de ciencia-ficción de los años 50 y 60. Pero no sólo eso, también hay autoreferencias a la propia saga (atentos al principio del film cuando se rompe una caja y se ve dentro cierto famoso elemento de las películas anteriores) e incluso autoreferencias a películas del mismo director (Encuentros en la tercera fase, ET). Ese cambio tan brusco respecto al tono de la anterior entrega es lo que probablemente no gustará a muchos (¿Indiana Jones + Expediente X?), pero en ese aspecto tengo que reconocer que yo salí satisfecho.
Lo que pasa que desde la última aventura del famoso arqueólogo han pasado 19 años y muchos han sido los personajes que desde entonces han cogido el testigo de Indy (La Momia, La Búsqueda, Tomb Raider) con lo cual el retorno del famoso personaje también viene marcado por las modas y los estilos marcados por esos títulos, hecho que se nota en la (quizás) excesiva cantidad de personajes que acompañan al protagonista en su aventura de esta película (algo que me hizo recordar a la secuela de La Búsqueda con Nicolas Cage), detalle que además le aproxima al cine familiar para todos los públicos sobretodo cuando se sabe cierto detalle relativo al personaje de Shia LaBeouf, alejándolo del esquema de aventurero más o menos solitario visto en las películas anteriores.
También hay que criticar la presencia de los personajes de Ray Winstone y John Hurt. El primero se intenta que supla al difunto Denholm Elliot (quien interpretó a Marcus Brody en los títulos anteriores) pero su personaje se antoja tan intrascendente como innecesario (el de Shia LaBeouf ya le da suficiente contraste al protagonista) mientras que el que ya es obviable es John Hurt, del que no me extrañaría nada que su personaje hubiese nacido tras una remodelación de guión después de que Sean Connery se negara a volver a su papel de padre de Indiana Jones que ya encarnó en La Última Cruzada. Eso si, entre los mejores momentos de la película está la dedicatoria que le hacen dentro del argumento a la ausencia de ambos personajes.
Y si más arriba citaba que la película toma modas y estilos de films aventureros vistos en los últimos años, eso se nota sobretodo en un final que es el que menos puede gustar a los espectadores, ya que lo que se ve en pantalla recuerda más a El Regreso de la Momia en su tramo final que no a una película del famoso arqueólogo (sumado al autohomenaje de Spielberg con sus Encuentros en la Tercera Fase). Pero pese a todo eso, ¿la película merece la pena?
Pues personalmente creo que si, pero si el espectador asume que va a ver una película diferente a las anteriores. Es como si uno coge un comic de superhéroes de sus inicios y uno actual: el personaje es el mismo pero su forma de actuar y el mundo en el que se mueve es diferente. Eso mismo ocurre con este Reino de la Calavera de Cristal, una aventura bien narrada por Spielberg (auténtico maestro que sabe realizar aún films entretenidísimos que sólo aspiran a hacer pasar un rato agradable al espectador, como es este caso) y que ha conseguido que me guste más esta película de lo que en un principio pensaba por el hecho de querer apartarse de las obras previas.
En cuanto a los actores, aparte de los citados (y prescindibles) Ray Winstone y John Hurt, y de un insuperable Harrison Ford (nadie puede sustituirle en este papel, por mucho que dejen un final semiabierto con un posible sustituto) del resto destacaría a Shia LaBeouf, correcto en su papel de joven rebelde compañero de aventuras de Indy y Karen Allen, cuya presencia es solamente nostálgica ya que hace exactamente lo mismo que En busca del Arca Perdida. Por su parte Cate Blanchett intenta dar a su personaje una maldad que nunca acaba de conseguir del todo, quizás por ese tono en ocasiones forzadamente familiar y forzadamente humorístico que quiere tener la película, si bien la actriz cumple con solvencia en su papel de malvada.
Pese a todo el resultado final es una obra que poco recuerda a los films originales pero muy entretenida, con un Harrison Ford que demuestra poder encarnar aún con solvencia a Indiana Jones pese a la edad que ya tiene, con un montón de referencias tanto a la propia saga como a otros títulos del género, con un tono nostálgico por la presencia de algunos personajes y detalles. Y sobretodo por arriesgarse y ser un homenaje a la ciencia-ficción de los años 50 más que a los seriales de aventura de los años 30, lógica evolución teniendo en cuenta los años pasados para el personaje.
LO MEJOR: La labor de Steven Spielberg como director y de Harrison Ford como protagonista. La historia, homenaje a la ciencia-ficción de los años 50 en lugar de los films más aventureros de las anteriores entregas. La película en si (hay que tomarla como un simple entretenimiento, eso si, resuelto bastante bien).
LO PEOR: Justamente lo citado en el apartado anterior (la ciencia-ficción) es para mi uno de los elementos buenos de la película pero también reconozco que al ser el que más rompe con los esquemas de las películas previas, también puede ser el que menos guste. Asimismo el tono familiar y los elementos que la hacen parecerse a otras películas del género le quita el espíritu único que tenia la trilogía original, dejando al resultado final como una buena película protagonizada por Indiana Jones... pero que perfectamente podía haber protagonizado otro héroe cualquiera.