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viernes, 17 de enero de 2020

LA BRIGADA DE LUZ, DAREDEVIL (dos) y TRANSMETROPOLITAN (resto)


En ocasiones sucede que la obra que menos te podias imaginar despierta tu interés, siendo eso lo que me ocurrió con La brigada de luz, un libro de ciencia-ficción de Kameron Hurley que pensaba que sería demasiado farragoso para mi gusto, pero que ha acabado siendo bastante entretenido. En el futuro en que nos situa esta obra los paises (tal y como son hoy en día) han sido sustituidos por corporaciones, que controlan con mano de hierro a la población. Obligados a alistarse en las fuerzas armadas si quieren lograr la ciudadania (y los derechos que ello conlleva), la historia se centra en Dietz y su duro periplo para convertirse en soldado y transformarse en luz (esto último en referencia a que las personas en este hipotético futuro pueden ser disgregadas y viajar a la velocidad de la luz siendo eso mismo, para luego volver a materializarse) Pero el problema vendrá cuando en esos "saltos" Dietz se vaya dando cuenta de que los motivos por los que lucha quizás no sean los que le han inculcado, en una obra narrada de forma trepidante, que bien podría considerarse una mezcla entre películas tales como Starship Troopers, Al filo del mañana y Doce monos, lo que bien puede dar una idea del resultado final.
En mi lista de lecturas de Daredevil entró el tomo El diablo en el infierno, que incluye los números 265 al 273 con guión de Ann Nocenti y dibujo de John Romita Jr., el cual me ha resultado una lectura aceptable pero que sin duda alguna se me ha quedado un poco "coja", en el sentido de que las historias que incluyen se nota mucho que son partes de una integridad que aqui no está cubierta. Ello se debe a la mala estructuración a la hora de editar estos comics, ya que la aventura inicial empieza con la historia ya en marcha, al ser la conclusión de Inferno, un crossover mutante de la época, mientras la trama final queda también sin resolver del todo, aparte de encontrar al protagonista en una situación que nunca se sabe nada de lo que la originó, dejando tras su lectura con el problema de no poder valorar en condiciones algo que vendría a ser como ver una serie a medias, sin saber de donde viene ni adonde va. Aparte del buen trabajo gráfico obra de Romita Jr. lo más destacado sería el arco argumental sobre los derechos de los animales, pero al no quedar del todo resuelto en este tomo aumenta la insatisfactoria sensación final citada antes.
Aunque no haya podido leerlos en su orden, debido a la muchas veces comentada disponibilidad que tienen ciertos comics cuando los pides en las bibliotecas, no me pude privar de anticipar El retorno del rey (que pese a ese título no tiene nada que ver con la saga de El Señor de los Anillos), más que nada por la curiosidad de ver a Kingpin en su exilio en Galicia, antes de retornar a Nueva York para ser lo que mejor ha sido: la némesis perfecta de Daredevil. Como es lógico, todo lo que le antecede tendré que leerlo cual si fueran precuelas, ya que este tomo marca el final de la etapa de Ed Brubaker y Michael Lark a cargo del Diablo Guardian de Marvel, pero a diferencia de la reseña superior, incluso leído este comic sin conocer todos los motivos de los personajes que por este arco argumental circulan, estamos ante un destacable relato que sin duda te deja con las ganas de averiguar que llevaron a todos ellos a las circunstancias en las cuales te los encuentras aqui. A resaltar también que el presente volumen finaliza en el que fue número 500 de la cabecera de Daredevil, que se completa con una breve historia a cargo de Ann Nocenti y David Aja.
Tras haber leído hace unos dias los números disponibles en mi biblioteca más cercana de Transmetropolitan decidí que era tiempo de completar la colección, por lo que me solicité el resto a otra biblioteca y procedí a leerlos. Al haber empezado la lectura por los tomos 1, 3 y 4 (de 10) para seguir por orden empecé por el 2 titulado Pasión por vivir, donde destacaría los dos primeros números unitarios en los que se puede ver dos formas de "entender" la vida más allá de la muerte (siendo del todo seca y traumática la segunda), si bien el arco argumental principal sería una historia en tres partes sobre el pasado de Spider. Saltando al tomo 5 (Ciudad solitaria) se profundiza más en conocer a su desatado protagonista más una historia en donde una pelea urbana deviene en una crisis contra todo lo de Spider con brutalidad policial incluida.

En el sexto tomo (Escarba hondo) el protagonista empieza su contraataque hacia los poderes fácticos que lo quieren tener controlado, que continúa en el volumen 7 (Las rajadas de Spider) junto con dos brillantes números con unas acertadas críticas contra la prostitución infantil y como la sociedad trata a la gente con problemas mentales. El destino se descubre predeterminado para el protagonista en el 8 (Canto fúnebre) pero en el 9 (La cura) parece volver a tener la suerte a su favor (al menos en cuanto a sus objetivos), finalizando en el 10 (Una vez más) que además incluye los especiales La escoria de la ciudad y Odio todo esto donde vemos el futuro distópico de esta Transmetropolitan en manos de un montón de destacados autores.

El resultado final es una brutal y muy notable sátira grotesca contra muchos aspectos de nuestra sociedad actual, con unos personajes excesivos pero también entrañables (no solo Spider Jerusalem sino también sus "sucias" ayudantes Channon Yarrow y Yelana Rossini) y envuelto todo en el marco de un futuro distópico de ciencia-ficción que en algunos detalles sigue estando plenamente vigente (esta serie ya tiene más de dos décadas de antigüedad: se extendió de 1997 a 2002), lo que es digno y triste testimonio de la degradación humana: una visionaria muestra de que no vamos precisamente para mejor, sino todo lo contrario.