lunes, 9 de abril de 2018

SHERLOCK: EL GRAN JUEGO, PARASYTE (7), AMERICAN VAMPIRE (8), JOE GOLEM: DETECTIVE DE LO OCULTO y dos comics sueltos

Hace unos meses me leí la adaptación en formato manga del primer episodio de la primera temporada de la famosa serie de televisión Sherlock, y con la disparidad propia de las lecturas de biblioteca (donde puedes leer en función de que esté -o no- disponible lo que quieres) ahora le ha tocado el turno a El gran juego, que corresponde al tercer episodio de la 1ª temporada. De nuevo nos encontramos con una adaptación magnífica del citado capítulo, en el que esta versión al siglo XXI del famoso detective victoriano se encontraba por primera vez cara a cara con su gran némesis, en este caso Jim Moriarty. Disfrutando de un notable apartado gráfico de nuevo a cargo de Jay, que recrea de forma destacable escenarios y sobretodo los actores que dieron vida a los personajes, las opciones para comprarlo se repiten en cuanto a su edición: normal o la de coleccionista, siendo esta última la que he podido leer.
Coincidiendo en ser también en formato manga, así como en lo destacable de su resultado final, también he podido leer la séptima entrega (de un total de ocho) de Parasyte, una serie de la que hace unos meses pude leer seguidas sus primeras seis entregas. Como cuando lei lo anterior lo compartí con las dos películas que adaptan esta obra, digamos que ya sabía como había acabado la misma cinematográficamente, por lo que aunque se tomarán licencias respecto al original pensaba que no me asombraría... pero nada más lejos de ello. Siendo evidente como de forma paulatina se van cerrando las varias líneas argumentales abiertas (siendo la principal aqui esa operación para erradicar a los parásitos de las altas esferas), he de admitir que el nivel de gore es realmente impresionante (y lo digo para bien) a lo que añadir ese curioso "detector" de parásitos: un asesino en serie humano (por aquello de que un monstruo seria quien mejor puede detectar a otro monstruo) Sin lugar a dudas un soberbio manga del que me quedo ahora a la espera de leer proximamente su culminación con la gran confrontación final que al final de este tomo nos deja con un cliffhanger de infarto.
Ya hace un año que me pude leer de golpe todo lo que había en la biblioteca del comic American Vampire, del que guardo un agradable recuerdo, por lo que me gustó volver a encontrar a sus personajes principales en este octavo volumen que sirve además para cerrar el segundo ciclo de esta serie. En esta ocasión, y como ya la misma portada deja bien claro, tendremos un vampiro astronauta: Skinner Sweet, el primer nosferatu americano, y antihéroe de esta epopeya desde sus orígenes, se verá en órbita alrededor de nuestro planeta mientras esa otra heroina de esta serie, Pearl Jones, se enfrentará junto a Felicia en el desierto de Nevada a una gran amenaza de proporciones milenarias que podría provocar el Apocalipsis.

Es curioso que esta serie tuviera un primer ciclo que constó de 34 números, mientras que este segundo ha sido de tan solo 11, pero sin conocerlo en el momento en que yo escribo esta reseña parece que American Vampire se ha quedado parada por una larga temporada, ya que este es además el último volumen editado aqui en España desde hace dos años. Si el hiato de tiempo se dilata mucho luego tendré que hacer una relectura de los números previos, lo que resulta una lástima porque el final al que asistimos aqui marca lo que probablemente se desarrollará en lo que ya será la tercera temporada de esta serie, resultando intrigante pensar por que derroteros se decantará su responsable Scott Snyder, que junto con el destacado trabajo gráfico de Rafael Alburquerque son los que han hecho destacable esta cabecera.
Uno de mis autores preferidos es Mike Mignola, el famoso padre de Hellboy, si bien su carrera ha sido bastante amplia y variada. Admito que igual no siempre me ha convencido, aunque eso es algo habitual en cualquier artista a lo largo de los años, pero su nombre en la cabecera de un comic siempre ha sido para mi sinónimo de lectura obligada (despues el resultado final es tema aparte) Probablemente el problema que arrastrará para siempre, más allá de la calidad de sus trabajos ajenos al personaje, es haber sido el creador de Hellboy, por el que es mundialmente conocido, si bien también es cierto que diseñó para él, tanto solo como en compañía de otros autores, un universo bien rico y variado.

Normalmente cuando existe ese relativo "encasillamiento" es costumbre probar nuevos géneros, nuevas historias y nuevos personajes, que es lo que debe haber ocurrido con este Joe Golem: Detective de lo oculto, pero aunque los dos arcos argumentales incluidos en este primer tomo (El cazador de ratas y Los muertos sumergidos) resultan una lectura entretenida y muy en la línea de su autor, la sensación que deja es que estamos ante una variante de aquello que le hizo famoso. El planteamiento resulta curioso, presentando un Manhattan de 1965 que en esta realidad quedó parcialmente sumergido por un terremoto. En ese escenario nos presenta a un Joe Golem que bien podría haber sido el propio Hellboy, junto a un Sr.Church que si tiene equivalente sería el profesor Bruttenholm de las historias del diablo rojo. Y claro, por más que la historia tenga una aceptable atmósfera o que el apartado gráfico de Patrick Reynolds sea destacable, me quedo con la sensación de que me quieren vender como nuevo algo que no lo es, máxime siendo Mignola (con Christopher Golden) el responsable del guión, si bien insisto en lo correcto del resultado final.
Como complemento a estas lecturas de biblioteca añadir dos comics sueltos que he puesto para la venta por Wallapop: uno del popular Snoopy titulado No ets un cas d'urgència, Charlie Brown (en catalán y de Edicions 62) que resulta tan notable como siempre lo ha sido esta popular tira cómica y del coleccionable Las mejores historietas del comic español el tomo dedicado a Zipi y Zape, un total de 190 páginas tremendamente entretenidas e incluso podría añadir que curiosas ya que son un buen reflejo de como ha cambiado la sociedad desde entonces a hoy en día.

No hay comentarios: