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miércoles, 18 de abril de 2018

NATACHA (2), USAGI YOJIMBO Y LAS TORTUGAS NINJA, PERROS VS. GATOS, ¿QUÉ ES EL HUMOR? y WONDER WOMAN: WARBRINGER

No la conocía de nada pero he descubierto a un personaje realmente muy interesante de ese comic francobelga que ya me había deparado agradables sorpresas en el pasado: la intrépida y aventurera azafata Natacha, una heroina muy sensual para su época (hablamos de los años 70) pero que no cae (demasiado) en los estereotipos típicos de que si una es guapa, ha de ser tonta, a lo que añadir el mostrarla como una mujer resolutiva e independiente que no tiene necesidad de ser siempre la damisela en apuros.

Lo que puede llamar la atención es la disparidad de páginas entre historias, al no seguir esa tónica más o menos habitual en este estilo de comic de presentar aventuras de una duración determinada. De esa manera las más extensas en este volumen serían las tituladas Un trono para Natacha y El decimotercer apóstol, siendo la primera una trama de espionaje muy bien desarrollada y la otra una aventura arqueológica al estilo de Indiana Jones, estando ante dos historias realmente muy destacables.

El resto, aunque no tan extensas, siguen la misma tónica de relatos notables con unos buenos desarrollos de sus premisas argumentales: en Doble vuelo ofrecen una aventura trepidante que comienza con el secuestro de un avión por parte de nuestra protagonista, mientras que en Juego de manos, juego de villanos estamos ante una intriga muy al estilo de las de Agatha Christie pero con acertadas notas de humor, que tiene una resolución brillante teniendo en cuenta que apenas se extiende durante 13 páginas.

Este tomo se completa con tres historias breves, todas ellas destacables, más luego 26 páginas de extras, que sirven para acercarnos a un personaje bastante desconocido por aqui, pero que en su pais de origen triunfó, hecho evidente al mostrar a una protagonista tan femenina como atrevida, no haciéndola caer en los estereotipos para las mujeres que se estilaban por aquel entonces (donde tenian una posición más secundaria, a la sombra del protagonista masculino)

Aún así a nuestra heroina la suele acompañar un colega de trabajo llamado Walther, sin nunca ir más allá de la amistad, pero con una evidente tensión sexual en el ambiente, si bien lo mejor desarrollado en ese aspecto es el contraste entre sus diferentes personalidades y como reaccionan ante los diferentes giros argumentales que toman las historias en las que se ven inmersos (haciéndose evidente en algunos casos su época de origen)
En el más reciente Salón del Comic de Barcelona decidí comprar el comic Usagi Yojimbo y las Tortugas Ninja con la clara intención de lograr que me lo firmara su autor (Stan Sakai), invitado al citado evento. El objetivo lo logré, con lo cual ya tengo algo de un autor y su personaje al que conocí leyendo todo lo que había disponible suyo en las bibliotecas.

No sería la primera vez que estos personajes cruzan sus destinos (de hecho entre los extras del presente comic se adjunta la versión original del que fuera primer crossover entre uno y los otros) pero estamos ante lo que sin duda se podría tildar como un cértero cruce entre estos personajes, partiendo de una leyenda tradicional de la cultura japonesa sobre un siluro gigante, para a partir de ahi construir una destacable aventura con un ritmo muy fluido, en la que tanto el cuarteto de quelonios como el conejo samurai quedan muy bien definidos. Por ser breve (40 páginas) igual el formato grapa le hubiera ido mejor, pero bien por la editorial al decantarse por este formato tomo para coleccionistas que se completa con multitud de extras así como portadas variantes.
Entre tantos autores que he conocido gracias a las lecturas que me proporcionan las bibliotecas está José Fonollosa, del que destacaría sus comics sobre los gatos que inició con Miau. Con el grato recuerdo que tengo de ellos, sumado a mis anheladas ganas de tener uno (salvo perros y gatos he tenido toda clase de mascotas, siendo la última una cotorra argentina) así como otros factores, cuando en el más reciente Salón del Comic de Barcelona ví que estaba firmando este autor no dudé para allí mismo comprar uno de esta serie dedicada a los felinos y así tenerlo dedicado. 

Con el objetivo cumplido tengo que admitir este Perros vs.Gatos ha sido la gozada que yo me esperaba, realizando en él un divertido contraste entre los dos tipos de mascotas más usuales y el comportamiento habitual de las mismas. Aqui no hay ganadores ni perdedores, porque al final ambos son igual de entrañables, y en el fondo aqui no dejan de reflejarse situaciones que aquellos que hayan tenido alguna de estos dos tipos de mascota enseguida reconocerán (¡incluso yo, sin haber tenido, admiro lo acertado de algunas de las tiras al haberlo vivido en familiares y/o conocidos que si tenian o han tenido algún perro o gato!)
Aún hay alguno que cuando miro la revista por la biblioteca me parece más o menos simpático, pero es buena verdad que desde que ocurrió aquel caso de censura en la revista El Jueves a raiz de la abdicación de Juan Carlos I, los mejores dibujantes de la misma salieron de ella (o al menos los que a mi más me gustan) formando la revista digital Orgullo y satisfacción que duró tres años y medio.

El presente comic sería una recopilación de 100 chistes que intentan responder (con ironia, sarcasmo y bastante humor) a la pregunta que da título a esta obra, de la mano de autores de la citada revista digital como Ágreda, Albert Monteys, Alberto Gónzalez Vázquez, Asier y Javier, Bernardo Vergara, Guillermo, Paco Alcázar, Luis Bustos, Manel Fontdevila, Manuel Bartual, Mel, Morán, Oroz, Toni y Triz. El resultado bascula de la mano de cada autor si bien al final queda un entretenido ensayo donde se evalua ese concepto tan amplio que es el humor de las manos de quien mejor lo pueda analizar: los humoristas que se ganan la vida con él.
Siempre he pensado que el bastante amplio universo de los superhéroes (bien sea DC, Marvel o cualquier otra) podía tener más salida aparte de las viñetas, pero no tan solo a nivel visual en las múltiples adaptaciones para cine y televisión, sino también como novelas. En cambio, y que yo sepa, en caso de existir son más que nada a nivel anecdótico, y con escasos atractivos tanto para el lector habitual a estos personajes como al ajeno, si bien pueden ser como esa infantil justo también de Wonder Woman que me leí hace ya unos meses, donde al menos el personaje interactúa con otros de su mismo universo, sirviendo tanto como de incentivo para nuevos lectores como de guiño a los adultos que se acerquen a ella.

Esa que he citado era sobretodo infantil (aunque muy correcta de cara a su público potencial) pero hacía unos meses había visto en una libreria la novela Wonder Woman: Warbringer que pensaba yo que tomaría a la ahora muy popular heroina de los comics DC en una historia ya un poco más adulta. En estos tiempos, en que la literatura juvenil parece que no sepa existir si no es con sagas, esta novela sería la primera de cuatro, estando dedicadas cada una de ellas a lo que se denominan Iconos DC, por lo que tras esta tendrian que llegar las de Batman, Catwoman y Superman, cada una por un autor diferente. Los motivos para incluir a Catwoman junto a la trinidad más popular de los comics DC lo ignoro, si bien no me quejaré porque si llego a leerla pueda que me sorprenda y todo.

Quizás es que mis expectativas eran un poco altas, pero la cuestión es que tras leer esta novela al llegar a la biblioteca el resultado ha sido TAN SOLO entretenido, y aún así con matices. A diferencia de la infantil citada antes, en este caso no hay ningún tipo de interactuación (ni tan siquiera leve mención) a ningún otro personaje de los comics DC, empezando la historia cual si fuera el origen del personaje, aunque ambientado en la actualidad, y cambiando al inicial Steve Trevor por una adolescente como nuestra protagonista a la que tendrá que ayudar en una trama de esas donde se juega el destino de la humanidad. E insisto en que como mínimo es entretenido... pero me costó mucho imaginar a Wonder Woman como la protagonista de una historia en la cual ella podría ser plenamente intercambiable con cualquier otra superhéroina, siendo muy escasos los detalles relacionados con la mitología de este personaje.