Mostrando entradas con la etiqueta Crítica de cine: Buena. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Crítica de cine: Buena. Mostrar todas las entradas

viernes, 17 de marzo de 2023

DUNGEONS & DRAGONS: HONOR ENTRE LADRONES, crítica sin spoilers

Primero de todo un detalle colateral pero que tengo que mencionar: ¿porque franquicias que tienen un título español conocido y popular se estrenan con los títulos originales? Lo cito por el segundo film de Expediente X (The X-Files: Creer es la clave), las últimas películas (y la que está por llegar) de las Tortugas Ninja (usando el original Ninja Turtles) y esta misma de Dragones y Mazmorras, siendo todas ellas de fácil reconocimiento por varias generaciones de espectadores. Puede que quizás no quisieran que se relacionara con la anterior adaptación en cines del año 2000, que si se tradujo pero que fue repudiada tanto por crítica como por público (y de la que no puedo opinar porque no la he visto)

Como muchos sabrán, Dragones y Mazmorras fue en origen un juego de rol de fantasía heroica que tiene ya casi medio siglo de vida (nació en 1974) Tras cambios en su titularidad, ahora mismo pertenece a Hasbro desde 1999, que a su vez en el 2019 pasó a eOne Entertainment. Habrá quienes lo conozcan a fondo dicho juego, pero ese no sería mi caso, aunque la nostalgía ante esta franquicia me puede por la serie de animación de los ochenta y por los libro-juegos de Dragones y Mazmorras, que sin duda alguna marcaron mi infancia. Aún así tenía mis dudas, tanto por la mala recepción de la versión previa como por la de por si mala prensa que suelen tener este tipo de adaptaciones, con lo cual la sorpresa ha sido mayor ante lo que he visto.

En un panorama actual en el que el éxito se mide según el esquema del universo Marvel cinematográfico, está claro que los responsables de este film (Jonathan Goldstein y John Francis Daley) se han propuesto seguir ese mismo estilo en sus virtudes, que es lo que han logrado con esta película, haciendo evidente su gestación de cara a diseñar un universo propio tan amplio como los de Star Wars o El Señor de los Anillos, siendo con este último de Tolkien con quien puede tener más coincidencias temáticas. La película está enfocada como una partida del juego de rol que le da título, presentando a una serie de curiosos, pintorescos y más o menos carismáticos personajes que tendran que unir sus fuerzas para lograr un objetivo común, PERO el resultado en pantalla es accesible incluso si no has jugado nunca a nada de esto, aunque se intuyen por sus (quizás algo extensos) 135 minutos muchos guiños para expertos en dicha mitología (y también para simples nostálgicos, como es mi caso, con la serie de animación de los ochenta)
 
Que duda cabe que en una película así el reparto es fundamental, y ahi tengo que reconocer que todos cumplen con solvencia, destacando los protagonistas Chris Pine como Edgin (un embaucador trovador amigo de lo ajeno) y Michelle Rodriguez como Holga (una aguerrida guerrera con la que comparte amistad) Ellos dos, tras un espectacular inicio que luego se ve reflejado al final, deciden ir en busca de Kira, la hija de Edgin, que se había quedado al cuidado de su compinche de fechorías Forge (a cargo de un divertido Hugh Grant
 
El problema radica en que cuando dan con él, el citado Forge ha alcanzado un cierto poder, acompañado de una misteriosa bruja llamada Sofina, y no se lo pondrá fácil a los héroes, por lo que el duo protagonista tendrá que alistar nuevos miembros a su causa. Entre ellos es sencillo detectar los arquetipos básicos de los personajes usuales en este juego, pero el guión logra que el grupo resultante tenga fluidez, carisma y que funcionen muy bien en sus respectivos roles, destacando (al menos para mi) el de Sophia Lillis (a la que el público mayoritario descubrió como la joven Beverly en los dos films de Andy Muchietti que adaptaron la extensa It de Stephen King), sin olvidar cameos tan inesperados y divertidos como el de Bradley Cooper; aunque en si todos los personajes caen bien.

En resumidas cuentas esta Dungeons & Dragons: Honor entre ladrones resulta una sorpresa más disfrutable de lo que uno podía pensar, en la que viviremos aventuras fantásticas en espectaculares escenarios, acompañados de un reparto solvente que tienen a su cargo unos personajes carismáticos. Entre hazaña y hazaña también hay espacio para momentos más o menos graciosos, los cuales funcionan de una manera correcta y fluida, destacando la escena del cementerio y su desbordante humor negro. No es que estemos ante una obra maestra, pero esta película juega muy bien con sus virtudes (y sabe disimular sus flaquezas) ofreciendo altas dosis de entretenimiento al mismo tiempo que convence tanto a los que conozcan el material en que se basa como los que sólo les suene de forma tangencial.
=================================
  • FICHA TÉCNICA y SINOPSIS en IMDB (en inglés) y FilmAffinity (en español)
  • FECHA DE ESTRENO EN ESPAÑA: 31 de marzo de 2023.
  • Galería de posters por este enlace.

sábado, 28 de enero de 2023

LA BALLENA (THE WHALE), crítica sin spoilers de esta película

Si hace poco citaba en mi crítica de la película Babylon la polarización que había tenido por parte de la crítica especializada, otro tanto parece ocurrir con el nuevo film como director de Darren Aronofsky, que ha servido además como tabla de salvación para Brendan Fraser, algo olvidado desde hace tiempo como le pasó a John Travolta hasta que Tarantino lo recuperó para su Pulp Fiction (o como el mismo Aronofsky hizo hace algunos años con Mickey Rourke en su cinta El luchador, logrando el Leon de Oro de aquel año en la Mostra de Venecia) Pese a esa división de opiniones sobre esta película, eso no le ha impedido lograr tres nominaciones a los Oscars de este año: MEJOR ACTOR para Brendan Fraser, MEJOR ACTRIZ SECUNDARIA para Hong Chau y la de MEJOR MAQUILLAJE Y PELUQUERIA, esta última coherente a tenor del orondo aspecto de su protagonista.

No han sido estos los únicos logros conseguidos por este film, que tuvo bastante expectación cuando pasó por la reciente edición de la Mostra de Venecia (fue ahí donde empezó la carrera de Fraser para lograr un Oscar), y que ha conseguido varias nominaciones para los Globos de Oro o los Bafta (entre otros galardones), centrándose la mayoría de ellos en valorar la interpretación de su protagonista, que se aleja bastante del tipo de personajes con los que obtuvo fama entre finales de la década de los noventa y el inicio del nuevo siglo, periodo de tiempo en el que consiguió sus mayores éxitos de taquilla en comedias más o menos acertadas, o la trilogia de La momia.
 
Pero más allá de que el éxito le encasillara en cierto tipo de personaje, Fraser ya había demostrado ser un buen actor en films como Dioses y monstruos de Bill Condon, si bien allí su papel era más secundario, siendo el protagonista un notable Ian McKellen previo a que triunfara entre el público mayoritario encarnando a Magneto y Gandalf en las respectivas sagas de X-Men y El Señor de los Anillos. La ballena (The whale) puede considerarse el resarcimiento para su protagonista, todo dependiendo de como evolucione su carrera a partir de este punto, porque todas las alabanzas al trabajo de Fraser son totalmente justificadas una vez que uno ve la película, ya que el mencionado actor consigue sostenerla sobre sus robustos hombros (alabanza en este caso para los efectos especiales que le otorgan los 250 kilos que representa tener su Charlie) con una actuación entre triste, resignada y desgarradora, según el estado de ánimo de su personaje, pero con la que logra sobresalir frente a las muchas capas de latex y maquillaje bajo las que se esconde.
 
Y es que a medida que avanza la historia, en el transcurso de una semana, vamos conociendo a un hombre sin voluntad de futuro, que se abandonó ante la adversidad por la pérdida de un ser querido, pero que espera llevar a cabo un último acto de redención antes de su final. El mayor handicap que le puedo encontrar a esta película, y por el que muchos pueden citar que no sería nada más allá de un telefilm con ínfulas de grandeza, es lo muy evidente que se hace su origen teatral (está basada en una obra de Samuel D.Hunter), por lo que la casa donde vive Charlie será el escenario primordial durante casi todo su metraje. Pero la falta de movimiento escénico se compensa con unos actores realmente destacables, ya que aparte de un Fraser inmenso (en todos los sentidos) tan sólo hay cinco actores más durante toda la cinta, siendo buenos todos ellos, aunque destacando de forma especial la nominada al Oscar a mejor actriz secundaria Hong Chau como Liz, la cuidadora de Charlie, que sufre sin ocultarlo al ver como este se abandona por completo.

El título de la película juega no solo con el propio aspecto del protagonista, sino con la referencia constante a un clásico literario como Moby Dick, ya que una redacción sobre la citada obra parece ser lo único que le consigue recuperar cuando su cuerpo ya le advierte que está al límite. Es en su tramo final cuando queda claro el origen de la misma y la importancia que tiene para Charlie: quizás ahí ya entre en el melodrama puro y duro, al darse uno cuenta de que librará la mayor (y más dura) batalla contra el mismo, luchando hasta el final por la redención con su hija, a la que abandonó debido a las circunstancias (ya al inicio de la película queda clara la condición sexual de Charlie) pero a la que nunca olvidó, y con la que intentará congraciarse en esos momentos, más allá del desprecio inicial que despierta en ella. En resumen este film es una destacable crítica contra la sociedad actual, donde detalles de todo tipo (se citan la religión o la homofobia, aunque sobresale la importancia del aspecto físico) llevan a gente como este Charlie a un punto sin retorno.
=================================
  • FICHA TÉCNICA y SINOPSIS en IMDB (en inglés) y FilmAffinity (en español)
  • FECHA DE ESTRENO EN ESPAÑA: 27 de enero de 2023.

martes, 29 de noviembre de 2022

EL MENÚ, una deliciosa pesadilla en la cocina (crítica sin spoilers)

Las similitudes culinarias a la hora de escribir sobre una película son bastante usuales, y en un caso como este vendrían la mar de bien, pero antes que nada quisiera exponer mis pensamientos previos antes de ver el film El menú, ya que por los mínimos avances que ví, que una de sus temáticas fuera el ¿terror? era algo que me intrigaba y me llevaba a la duda. Tranquilos que podeis seguir leyendo porque esto es tan solo lo que me sugería la película ANTES de verla, que cambió una vez la pude ver (o, jugando a lo culinario, me deleité con ella) 

Lo primero que se me vino a la cabeza fue Blanco humano de John Woo, con Jean-Claude Van Damme de protagonista, por aquello de la caza del ser humano; mientras que estando presente el tema de la alimentación me recordé del personaje de Hannibal Lecter, todo un sibarita canibal, en cuya tercera entrega con Anthony Hopkins de protagonista ya estuvo de villano el actor Ralph Fiennes, presente en esta cinta dirigida por Mark Mylod
 
Ambas cosas me cuadraban con el hecho de que El menú se supone que es una sátira gastronómica con toques de crítica social, aunque tengo que admitir que fallé en mis presunciones, ya que lo que al final lo que prevalece es una de las sensaciones más antiguas, que según el refranero popular mejora si se sirve fría (nueva referencia culinaria que, con otra más, me viene al dente) Porque El menú sería sin lugar a dudas una de las mejores películas de este 2022.

A la hora de comer, cada uno tiene su particular manera de hacerlo, pero en cierto momento de esta película el personaje de Fiennes pide a sus comensales que NO coman... sino que saboreen, que degusten y que se recreen en los sabores de lo que les van a servir. Su personaje vendría a ser una acertada parodia llevada al exceso de esos chefs de renombre que no te ofrecen algo para alimentarte, sino más bien algo bonito para ser contemplado y admirado más que saboreado. Eso se caracteriza por platos donde lo alimenticio apenas te da para un bocado, pero por los que los más sibaritas pueden llegar a pagar cantidades exorbitantes, como le ocurre a los personajes de esta cinta: una pléyade de supuestos esnobs que en muchos casos viven de las apariencias (pero que también esconden sus oscuros secretos), entre los cuales entra por pura casualidad el personaje de Anya Taylor-Joy, cuyo caracter menos petulante que el del resto parece resaltar tanto del citado grupo de comensales como al propio chef encarnado por Fiennes.
 
Con una excéntrica manera de comportarse, a medio camino entre lo excéntrico y lo dictatorial, la férrea actitud de control absoluto que ejerce el chef Slowik sobre el destino exclusivo al que lleva a sus comensales (y TODO lo que allí acontece) no le acaba de cuadrar cuando se entera de que uno de ellos (el personaje de Margo, al que encarna Anya Taylor-Joy), no es el esperado en un inicio. Pese a todo seguirá con su idea de hacerles pasar a sus comensales una experiencia gastronómica única y excepcional, con una sucesión de platos a cual más excéntrico, y en donde lo que comenzó como un ágape un tanto arrogante (por el exceso de florituras en cada nueva receta) derivará en una despiadada crítica contra la petulancia de esa acomodada clase social, que en una situación problemática no deja de comportarse como seres humanos, en muchos casos mostrando pese a todo que son capaces de los comportamientos más miserables cuando las circunstancias se ponen en contra. Y todo ello con un ajustadísimo metraje de 107 minutos.

Para finalizar esta crítica, porque lo mejor es ir a ver esta película sabiendo lo mínimo de ella, me gustaría citar un detalle en el que no se ahonda, y por lo que creo que lo que podía haber sigo magistral se queda tan solo en un notable alto: la sumisión del equipo de cocineros de Slowik. Cuando quedan más o menos claras las características del personaje de Fiennes uno las puede entender (o no), pero resulta curioso que todos los del equipo culinario que le acompaña sigan con absoluta obediencia y sumisión todas sus órdenes (sirva de ejemplo el tono militar cada vez que da alguna palmada, siendo incuestionable TODO lo que venga de él), lo que me llevó a recordar a cierto villano de Marvel: el Hombre Púrpura, que debutó en las páginas de Daredevil y que se vió en la serie televisiva Jessica Jones a cargo del actor David Tennant. La capacidad de este personaje era controlar a la gente con su voz, pero como logicamente algo así no tiene cabida en un film como este, las motivaciones del equipo de Slowik quedarán sin justificación.
=================================
  • FICHA TÉCNICA y SINOPSIS en IMDB (en inglés) y FilmAffinity (en español)
  • FECHA DE ESTRENO EN ESPAÑA: 2 de diciembre de 2022.

miércoles, 23 de noviembre de 2022

MUNDO EXTRAÑO, aventura pulp clásica (crítica sin spoilers)

Cuando se anunció esta película no me quise emocionar mucho pero... me ilusioné por lo que planteaba: un homenaje a los viejos seriales de aventuras y ciencia-ficción que poblaban las pantallas y los comics de hace décadas, así como al espíritu de obras clásicas de autores como Julio Verne, H.G.Wells o Emilio Salgari. Aún así asistí al pase con reticencias, por ser un film de la factoria Disney, con todo lo que ello conlleva (que no digo que sea malo, pero en donde influyen ciertos factores para que el resultado final sea un producto apto para toda la familia, lo que en ocasiones conlleva un tono más infantil y no tan adulto como sería el esperado según que momentos)

No negaré que eso está presente, pero al mismo tiempo es un toque coherente teniendo en cuenta que aquellas aventuras fantásticas de antaño se caracterizaban también por una inocencia que a los ojos del espectador actual puede parecer simpleza. De hecho cuando se nos presenta al intrépido Jaeger Clade se hace con todos los tópicos del personaje aventurero que es, aunque eso parece no haber pasado a la siguiente generación, ya que su hijo Searcher no ha salido con el espíritu de explorador de su progenitor. De hecho ambos se separan cuando en una expedición para salvar Avalonia (que es donde viven) Jaeger decide continuar hasta más allá del horizonte, pasado el límite de unas montañas que no ha superado nadie, mientras Searcher descubre una extraña planta que podría ser el remedio energético que precisan para subsistir.

Todo este primer tramo de la historia se nos plantea en imágenes recuperando el espíritu de aquellos viejos seriales que citaba antes, bien sea con fotogramas en blanco y negro o con páginas de las antiguas revistas pulp que los acogian. Pero aunque ese espíritu está presente en todo momento, lo que aqui hacen Don Hall y Qui Nguyen (los directores de esta película) es desarrollar algo diferente. Como es natural, al tratarse de un producto FAMILIAR Disney, el citado concepto lo pongo en mayúsculas porque se verán inmersos en esta nueva aventura tanto Searcher como su mujer Meridian (de raza negra), el hijo de ambos Ethan (gay discreto, para no ofender a los más susceptibles) y el perro de la familia (de tres patas se supone que por haber nacido así o por haber perdido una por motivos desconocidos), a los que sumar al perdido Jaeger, con el que se reencontrarán en el momento más inesperado. 
 
Con ese abanico rompen estereotipos de raza, discapacidad o condición sexual, aunque siga habiendo evidentes tópicos (patentes en Jaeger), dando cabida a una diversidad ya presente en los últimos estrenos de la factoria (sirva de ejemplo la pareja de dos mujeres vista en la reciente Lightyear) En su aventura en busca de una solución al problema planteado se desarrolla una historia con ecos de Viaje al centro de la Tierra de Julio Verne, aunque llegados a cierto momento ¡SORPRESA! cuando te queda claro el concepto orgánico de lo que se van encontrando a su paso, al beber esta película también de cierto film fantástico de 1966 cuya novelización corrió a cargo de Isaac Asimov. Aparte de vivir todo tipo de peripecias, tambien se verá el choque generacional entre los tres miembros de la familia Clade, aunque resulta un poco raro que el abuelo Jaeger acepte de tan buen grado la condición sexual de su nieto.
 
Dicha decisión la supongo basada en el hecho de que esto tenía que ser una película apta para todos los públicos, y no era plan de mostrar un abuelo intransigente o de mentalidad retrógrada... aunque sea tristemente algo de lo más común hoy en día (si bien siempre puede haber excepciones) Para divertir a los más pequeños se usa el "alivio cómico" del perro antes citado de tres patas (que reconozco que se hace entrañable), así como de una criatura tentacular azul sin posibilidad de vocalizar, pero bastante habil en lo de gesticular. Todos ellos se verán inmersos en una aventura atractiva, donde sorprende todo lo que se encuentran a su paso y al mismo tiempo resulta coherente cuando se comprende lo que es, en una clara moraleja para que aprendamos a vivir en nuestro entorno, sin la actitud actual del ser humano que está llevando al abismo el único planeta que tenemos para vivir, con un cambio climático temible.
=================================

domingo, 2 de octubre de 2022

SMILE, no te rias que es peor ¡condenada sonrisa! (crítica sin spoilers)

¿Cuantas veces no habremos visto la típica escena de dos tipos mirándose, uno con una sonrisa morbosa en la cara y el otro preguntándose de que puñetas se rie, y si es que tiene "monos en la cara"? La sonrisa no siempre sería sinónimo de algo agradable, y sino que se lo digan a Batman y su eterna lucha de décadas contra el Joker (o la mezcla de ambos "conceptos" que representa el Batman que rie) La sonrisa sería un gesto que perturba e inquieta cuando no es natural, y el cine de terror se ha valido de ello en innumerables ocasiones para dejar así más patente la mente perversa del psicópata de turno. 
 
El problema igual proviene del hecho que el género del terror es uno de los más baratos de realizar y más facilmente rentable, lo que ha llevado a una sobreexposición en la que podriamos decir aquello de "ya ni las pelis de miedo dan miedo", porque el espectador ya se las ha visto "de todos los colores" y resulta dificil innovar. Además con la cercana festividad de Halloween (en el momento que escribo esta crítica) parece como si fuera una obligación el tener que estrenar películas podriamos decir "inquietantes" (si nos atenemos a que el terror es cada vez más dificil de alcanzar), pero que reinsisten con fórmulas conocidas (por ejemplo el "slasher" y sus infinitas variantes y secuelas) ofreciendo resultados más o menos aceptables, pero en ningún momento emblemáticos.

Admito que tal pensamiento es el que me ha llevado a alejarme del género (al menos con expectativas de algo memorable, a lo sumo me conformo con ameno), por lo que me llamó bastante la atención la campaña promocional de la película Smile, ya que a priori no parecía de antemano que fuese más de lo mismo. Se trata del debut en la dirección de Parker Finn, cuya filmografía la conformaban hasta ahora tan solo dos cortometrajes titulados The hidebehind y Laura Hasn’t Slept, siendo justo este último la inspiración para el presente film. Llevada a cabo con un modesto presupuesto de apenas 17 millones de dólares (tal y como dije antes, el terror sería un género que por regla general no suele necesitar de mucha inversión), las cifras iniciales ya dan a entender que será rentable bastante pronto, lo cual reitera el enésimo ejemplo de lo que señalé unas líneas más arriba. Pero lo esencial sería saber si merece la pena esta cinta protagonizada por Sosie Bacon, vista en series de televisión como por ejemplo Por 13 razones (e hija de los tambien actores Kevin Bacon y Kyra Sedgwick), y la respuesta sería sin duda alguna afirmativa... aunque con matices.

Y es que como siempre suele ocurrir cuando aparece un producto más o menos innovador, el mismo debe pagar el peaje de circular por escenarios comunes en el género, que pueden ser más o menos reconocibles según la experiencia que tenga cada espectador, aunque en algunos casos también predecibles. Smile, que para definirla de alguna manera vendría a ser una mezcla entre The Ring (por lo de la maldición) e It follows (por la incertidumbre sobre la amenaza), juega durante mucho tiempo con la ambigüedad de si verdaderamente existe una presencia perturbadora, o todo son sólo locuras de su protagonista. En esos momentos acierta bastante a la hora de mostrar como la sociedad (bien sean amigos, parientes o colegas laborales) suelen dejar de lado al enfermo mental, que aparte de su desgracia tiene que convivir con los prejuicios de personas con las que creía poder contar. Sería en su tramo final cuando se decanta por traer a primera línea un trauma que arrastraba la protagonista, y del que se han ido dando pequeñas pinceladas antes, lo que ya deja concretada (que no explicada) la amenaza, con un final abierto para una hipotética secuela.

Algunos espectadores pueden argumentar que desde su (notable) principio se hace previsible como acabará, pero en este caso no diría que eso sea algo más o menos acertado (lo dejo a juicio de cada uno que vea este film), sino que el placer morboso para quien lo ve radica en ser partícipes de todo el trayecto de la caida en desgracia de la protagonista, donde se la somete a todo tipo de suplicios (y sustos al espectador) a cual más insidioso, lo que va provocando su paulatino declive. También es justo reconocer la buena imagen que deja su director novel (el antes mencionado Parker Finn) a la hora de planificar ciertos planos y secuencias, que consiguen aumentar la inquietud del espectador, sobretodo cuando las sonrisas dejan bien claro que algo no funciona bien para la sufrida Rose (el personaje a cargo de una bastante convincente Sosie Bacon) En resumidas cuentas Smile es una buena película, más inquietante que de terror (aunque algún momento tiene), que maneja con destreza elementos comunes al género para ofrecer un film que puede recordar a ejemplos previos, pero que consigue tener personalidad propia.
 =================================

sábado, 21 de mayo de 2022

CHIP Y CHOP: LOS GUARDIANES RESCATADORES (crítica sin spoilers)

La ¿estrategia? de Disney es como mínimo bastante curiosa: hace unos meses estrenaron en su plataforma de pago la película Red de Pixar, que claramente tendría que haber tenido vida en las salas de cine (que no le concedieron), y ahora estrenan esta Chip y Chop: Los guardianes rescatadores que, una vez vista, podía haber tenido potencial para llegar a los cines (aunque me imagino que las dudas sobre lo que era en origen este proyecto fue lo que les decantó para que se estrenará en Disney Plus) Y es que en un principio esto iba a ser la contraréplica al éxito de las películas de Alvin y las ardillas, con lo que su "potencial" podía verse reducido al valorarse tan solo como una "variación" de un éxito preestablecido, por lo que su destino final para la plataforma de streaming parecía lo más lógico y menos arriesgado.

Pero por el camino (el proyecto original data del 2014) se han cambiado muchas cosas, y para sorpresa de un servidor... ¡ha sido para bien! Si en 1988 la película ¿Quién engañó a Roger Rabbit? de Robert Zemeckis hacía la fusión definitiva entre nuestro mundo real y el de los dibujos animados (algo con lo que siempre había coqueteado el cine casi desde sus inicios), muchos son los ejemplos que han intentado una jugada más o menos similar (sin ir más lejos el pasado año 2021 Space Jam: Nuevas leyendas) pero pocos los que han acertado. Ahora con esta Chip y Chop: Los guardianes rescatadores tenemos el ejemplo del film que logra coger el relevo, aunque no logre superarlo, del clásico dirigido Robert Zemeckis que encandiló a varias generaciones.
 
Esta película creo que es tan divertida y entretenida para adultos como para niños, algo de lo que muy pocas se pueden vanagloriar ya que generalmente se entiende el cine infantil como algo sólo apto para los más pequeños, mientras que a los mayores puede parecerles un producto mejor o peor, pero no específicamente orientado hacia ellos. Si, es cierto que hay excepciones, pero sorprende que esta sea una de ellas ya que es un film con inesperados toques satíricos sobre el estado de la animación y del cine actual, que viene bajo el sello de toda una corporación como es Disney. Tomando como ejemplo el citado film de Roger Rabbit de 1988, que tendrá su referencia aqui, uno podría pensar que se repetiría el ejemplo de la antes citada Space Jam: Nuevas leyendas de insertar, aunque fuese algo forzado, TODAS las franquicias de la compañía. O sino la transformación, allí también vista, de la animación tradicional a ese 3D que se ha puesto de moda ultimamente, en algunos casos restando todo el encanto del original. Hay tanto de lo uno como de lo otro aqui... pero bien encauzado se consigue ir más allá incluso con referencias ajenas a Disney.
 
Y es que con lo citado era previsible que el bastante amplio catálogo de esta productora saliera por aqui, pero bien pronto queda claro que no se ciñen solo en ellos, con la inclusión multireferencial más amplia que he visto en mucho tiempo (estamos ante uno de esos films que se repiten con agrado para poder pillarlas todas, porque hay una barbaridad), en la que incluso tiene cabida la versión descartada de cierto erizo, al que además dotan de la conciencia suficiente como para que tenga bien asumido su condición. Ese sería uno de la gran infinidad de cameos o referencias que hay en esta película que tiene más presencia en pantalla, ya que muchos otros son tan breves y escuetos que apenas te permiten esbozar una sonrisa ante el ingenio de lo planteado (de ejemplo cuando tocan franquicias ajenas) Porque en el fondo la historia es una sátira sobre el mismo Hollywood, en su eterna idea de reciclar conceptos de éxito en el pasado para así poder garantizarse un futuro, en este caso centrado primordialmente en la industria de la animación, con el objetivo puesto en el tráfico de esas copias piratas de éxitos de taquilla, aqui con personajes remodelados exprofeso para ellas.
 
Chip y Chop nacieron en origen en 1943 como dos ardillas traviesas que eran secundarios en los cortos de los personajes usuales de la popular factoria (como Mickey Mouse o el Pato Donald por ejemplo), pero en la década de los años ochenta Disney los reimagino como unos aventureros, en la serie Los guardianes rescatadores. La diferencia sutil está en que aqui se imagina que la misma no era dibujada sino actuada, centrándose la historia en el reencuentro de ambos amigos (que se conocían desde el instituto, y se separaron por discrepancias hacia como orientar sus carreras) cuando se ven inmersos en una trama de misteriosas desapariciones. La gracia está desde su misma concepción, ya que mientras Chip acabó como agente de seguros, Chop se hizo la cirugía para transformarse en un personaje digital. A partir de ahi se verán inmersos en una historia quizás algo esquemática en su concepto o en la definición de ciertos personajes, pero destacable ejemplo final de que se puede hacer buen humor metareferencial incluso, como en este caso, en lo que a priori parecía un producto menor.
=================================

martes, 3 de mayo de 2022

DOCTOR STRANGE EN EL MULTIVERSO DE LA LOCURA (sin spoilers)

Me suponía por los avances previos que esta secuela de Doctor Strange sería la primera película del cada vez más amplio y muy poblado universo Marvel cinematográfico en dar cabida al material que se ha añadido al mismo a través de las series de televisión que se estrenaron en Disney Plus el año pasado desde la de Wandavision. Curiosamente la mencionada seria una de ellas, porque resulta muy evidente que nos volvemos a encontrar con el personaje encarnado por Elizabeth Olsen tras los hechos que tuvieron lugar allí. Pero a diferencia de lo que yo pensaba, NO es imprescindible el haberla visto puesto que la presencia del personaje aqui queda muy bien justificada, siendo tan solo un extra de información no necesariamente primordial, pero si que agradecidamente complementaria.

Curiosamente la otra serie que sirve como complemento a esta secuela del Doctor Strange es la de animación What If, ya que al abrirse la veda de los multiversos con la reciente Spider-Man No way home (que recibe una mera mención anecdótica), los mundos alternativos que allí se presentaban tienen cabida aqui. Para ser exactos sería no tan solo aquel que se centra en el protagonista de esta película (Doctor Strange), sino el que sirvió como presentación a dicha serie, con cierto carismático personaje del que se abre la posibilidad de volver a verlo, ya que el mismo concepto del multiverso deja las puertas abiertas a todo tipo de hipotéticas versiones alternativas. La sorpresa fue máxima (al menos para mi) cuando a dicho personaje lo encontré siendo miembro de otro importante grupo en este universo de superhéroes, en el cual hay cabida tanto para el pasado (mutantes) como para el futuro (con cierto padre de familia bastante popular a cargo de quien el público lleva pidiendo desde hace meses), e incluso recuperando al cabecilla de otro popular grupo cuya presencia se centraba hasta ahora en una fallida serie de 2017 que apenas duró 8 episodios.

Pero no solo de guiños y cameos vive el fan de Marvel (a lo antes citado se podría añadir otro personaje de la mitología del protagonista que se deja ver en la primera escena entre créditos), sino también de que el resultado sea bueno, y sin lugar a dudas la elección de Sam Raimi como director ha resultado todo un acierto. Ello se debe a que cumple con lo que en origen iba a ser este amplio universo, en el que cohabitaran entrelazadas diferentes historias desde diferentes puntos de vista según los directores asignados a cada proyecto, algo que quizás no todas las películas han respetado, quedándose en cintas tan funcionales como poco personales. Al igual que pasaba con las aportaciones de Kenneth Branagh, Taika Waititi o James Gunn (por citar tan sólo tres ejemplos), en este caso esta Doctor Strange en el multiverso de la locura tiene el sello personal de Sam Raimi, cierto que tamizado para que entre a cuanto más público mejor, pero agradecido para dotar de entidad propia al resultado final, aparte de devolvernos a ese fantástico director que hace ya 20 años abrió la veda del cine de superhéroes con su inaugural Spider-Man.
 
Aunque los actores cumplen bien con los papeles asignados (atención a todo un habitual en el cine de Raimi, con el que además se cierra el presente film), me asombró BASTANTE una magnífica Elizabeth Olsen, cuya motivación para hacer lo que hace proviene de lo visto en la serie Wandavision (aunque insisto en que si no se ha visto es perfectamente entendible incluso para los néofitos), lo que la actriz aprovecha para ahondar en la brecha que se abrió allí, ofreciendo en esta película una doble versión entre la comprensión hacia lo que quiere obtener y la misma locura con la que pretende lograrlo. De igual manera cuando su personaje demuestra todo su poder (y Raimi nos lo ofrece con su toque personal) estamos sin duda ante alguien que bien podría dar un giro radical a este universo como hizo su homóloga de las viñetas en el evento titulado Dinastia de M, dejando al final que la Bruja Escarlata (o más bien Wanda Maximoff) sea el personaje femenino que ha tenido una mejor evolución en este universo en los últimos tiempos. 
 
Por contra se le podría achacar a esta secuela que dos conceptos de su título (multiverso y locura) no están tan presentes como todos desearian, si bien en el primer caso deja las puertas abiertas a que esas realidades alternativas (algunas tan extrañas como tremendamente atractivas) vuelvan a ser visitadas en algún futuro proyecto (es lo que tiene el multiverso, que TODO es posible) En cuanto a la citada "locura" sería la que motiva los hechos que aqui acontecen, que estando en las manos de Raimi podría haberse desmadrado como en otros proyectos suyos, pero que se encuentra en todo momento comedida por la mano de la productora, aunque sin que ello sea obstáculo para un espectaculo tremendamente entretenido y muy bien acotado, ya que sus 126 minutos se demuestran adecuados para lo que nos cuenta, sin esos excesos de metraje tan usuales en algunos tipos de producciones actuales. En resumidas cuentas una secuela quizás sencilla en su premisa argumental (aunque tampoco pide mucho más) pero todo un espectáculo visual con el que desconectar y dejarnos llevar para disfrutar.
=================================

martes, 1 de marzo de 2022

THE BATMAN, el regreso del CABALLERO OSCURO (crítica sin spoilers)

Si esta película se pudiera comparar con un embarazo, estariamos sin duda frente a uno bastante problemático, ya que todo fueron problemas para lograr sacar adelante esta producción, a lo que encima hubo de sumarse la pandemia por Coronavirus que retrasó su estreno previsto para el verano del 2021 hasta primavera del 2022. En origen este film lo tendría que haber dirigido, guionizado y protagonizado Ben Affleck en la continuación de sus aportaciones al universo cinematográfico DC, en donde ejerció como el Caballero Oscuro en Batman V. Superman, La liga de la justicia (tanto en la versión de Joss Whedon como en la de Zack Snyder) y sus cameos en Escuadrón Suicida y en la próxima The Flash; pero diferentes problemas le llevaron a apearse del proyecto.

Su sustituto como director fue Matt Reeves, el responsable de las dos últimas entregas de la trilogia-precuela de El planeta de los simios, películas más o menos apreciadas por público y crítica, aunque rechazó el guión de Affleck y escribió uno nuevo junto con Peter Craig. Pero la polémica se desató al saber que el escogido para ser el nuevo Bruce Wayne/Batman era Robert Pattinson, actor que para muchos quedó encasillado (para mal) como el vampiro luminiscente de las películas de la saga Crepúsculo, pese a que en su carrera posterior ha intervenido en muchos otros títulos de variada índole y pretensiones con directores tales como David Cronenberg o Christopher Nolan (en el caso de este último con Tenet, que estrenada en plena pandemia logró un moderado resultado, loable a tenor de las circunstancias sanitarias)
 
Esa inquina contra el actor escogido (admito que yo también tuve mis dudas) me hizo recordar cuando Michael Keaton fue criticado al ser elegido por Tim Burton como su Batman, ya que era un actor que por entonces se le conocía sobretodo por sus comedias, pese a que para muchos acabó siendo uno de los mejores Batman vistos en la gran pantalla. Y es que Pattinson se suma a una lista donde media docena de actores han interpretado al Caballero Oscuro en cine: Adam West en la película de la serie de los sesenta que le dió la fama, el citado Michael Keaton en las dos entregas de Tim Burton, Val Kilmer y George Clooney en las dos cintas "perpetradas" por Joel Schumacher, Christian Bale en la trilogía obra de Christopher Nolan y Ben Affleck en los títulos citados al inicio de esta crítica. Y el resultado final no podría ser más acertado ya que mientras que el Batman de Pattinson cumple con sus necesidades básicas, su Bruce Wayne se torna tan taciturno que materializa esa versión del personaje en la que no es él quien lleva la máscara de Batman, sino que sería Batman el que lleva la máscara de Bruce Wayne.

Con el acierto de tener a un protagonista convincente tal y como nos lo presentan, eso se extiende al resto del reparto, ya que no dejan de ser viejos conocidos tanto para los lectores de comic como para los espectadores de anteriores films del personaje a la gran pantalla, pero que aqui nos presentan desde una perspectiva diferente, estando ahi el mayor atractivo de esta película. Admito que mis dudas con Pattinson eran extensibles a la elegida para ser Catwoman: una Zoë Kravitz que no sabía si estaría a la altura de las circunstancias, siendo el resultado final realmente notable también gracias a la química que se establece con el protagonista. En el caso del Gordon al que interpreta Jeffrey Wright es justo citar que es el que se mantiene más estable respecto a los cánones establecidos para él, lo que se podría hacer extensible al Alfred de Andy Serkis, mientras que John Turturro y Colin Farrell (este último con un maquillaje digno de mérito) encarnan a viejos conocidos en el universo del Caballero Oscuro, quedando la puerta abierta para desarrollar la (previsible) ascensión del segundo en los bajos fondos de la ciudad, estando en proyecto una serie televisiva para ello.

¿Y de que va The Batman? Pues es una historia, sin soltar spoilers, centrada en la corrupción del sistema político en una ciudad ya de por si insegura como es Gotham, y en como aparece un individuo que se propone desvelar todas las patrañas ocultas con métodos nada ortodoxos, mediante una serie de asesinatos que me hicieron recordar tanto al villano de Seven como al de la saga Saw, aunque hay una clara referencia real, con semejanzas al asesino del Zodiaco cual lo reflejó David Fincher en su película de 2007. Y ahi es donde destacaría el notable trabajo de Paul Dano encarnando a dicho villano, que se hace llamar Enigma, de una manera del todo opuesta a como lo hizo Jim Carrey en Batman forever (donde dicho actor desataba todo ese histrionismo que le llevó a la fama) y recordando más en esencia al Joker de Heath Ledger, si bien no acabaría de llegar a su nivel (resulta evidente la intención del director Matt Reeves de encauzar esta película por la vertiente más o menos realista que usó Nolan en su trilogia del Caballero Oscuro, siempre con los evidentes matices propios del universo donde se engloba el relato) 

Contra dicho Enigma se tendrá que enfrentar un Batman aún novato (se supone que lleva dos años con su cruzada contra el crimen), y que aún es visto más como un vigilante enmascarado que como el guardian de Gotham, por lo que su presencia sigue levantando suspicacias allá por donde pasa En una trama de thriller de mafiosos donde se desarrolla la vertiente más detectivesca de Batman sobre la de superhéroe, el único handicap que le veo a este film sería una excesiva duración de tres horas, demasiadas para lo que en esencia nos cuenta, si bien consigue mantener un acertado ritmo narrativo que quizás falla en su último tramo, al dilatar momentos que se podrían haber condensado de forma igualmente eficiente. Pese a todo esta The Batman supone una de las mejores películas que ha tenido este personaje en los últimos años, que hace ilusionar al espectador de lo que pueda desarrollarse a partir de aqui, ya que aunque no tenga escena tras los títulos de crédito (como se ha puesto de moda en este tipo de género), antes de ellos ya deja varias sugerencias que habrá que ver si acaban concretándose en algo en el futuro.
=================================

lunes, 20 de diciembre de 2021

WEST SIDE STORY (2021) de STEVEN SPIELBERG, crítica sin spoilers

Hay historias universales, y una de ellas es sin duda la de los amantes de Verona, la inmortal pareja formada por Romeo y Julieta. Quien más o quien menos, entre los que me incluyo, habrá visto alguna de las innumerables adaptaciones del famoso relato en todo tipo de formatos y formas, pero si hay una versión emblemática es la de West Side Story, que tiene el mérito de haber sido durante mucho tiempo la segunda cinta que más premios Oscar había conseguido (10, entre ellos los de mejor película y mejor director), antes de que los 11 de Titanic y El Señor de los Anillos: El retorno del rey, empatadas con Ben-Hur, la desplazaran hasta la cuarta posición. 
 
Pese a ello tengo que admitir que la tenía pendiente de ver, hasta que pocos días antes de acudir a ver la nueva versión de Steven Spielberg la emitieron en un canal televisivo local y me decidí por ella. Ante tan altas expectativas tengo que admitir que en principio me costó un poco "entrar" en el West Side Story de 1961, ya que en esencia la historia es sencilla pero los números musicales ralentizaban un poco el ritmo y desarrollo de la misma. Eso cambió cuando asistí a los temas más populares de esta obra: María, Tonight y América, con los que enseguida se me hizo más accesible, así como asimilar el evidente trasfondo social en lo que vendría a ser una alegoría de temas tan candentes en la actualidad (xenofobia, racismo, trato hacia los inmigrantes, etc.) como hace seis décadas, cuando la película original se estrenó en cines.
 
Y es que no voy a negar que la clásica historia de amor entre Romeo y Julieta es en esencia bastante sencilla como para que el resultado final esté sobre las dos horas y media de metraje (tanto en la versión de Robert Wise de 1961 como en la de Steven Spielberg de 2021), siendo esa una de mis reticencias hacia el primer visionado de la clásica, pero algo ya asumido de cara a su remake. Porque su argumento es tan sencillo como trasladar a las familias Montesco y Capuleto de la Verona italiana donde las situó William Shakespeare al Manhattan de mediados del siglo XX, transformándolas en dos bandas rivales de pandilleros (los Jets y los Sharks) Los jóvenes Tony y María, cada uno con afiliaciones a uno de esos dos bandos enfrentados, se conocerán y enamorarán, intentando desarrollar su historia de amor en un ambiente claramente hostil, en donde los acontecimientos no les ayudarán precisamente a ello. 
 
Sin nadie restarle méritos hacia la huella que el film de 1961 dejó en la historia del cine, se antojaba un poco arriesgado que Steven Spielberg decidiera dirigir su primer musical haciendo un remake literal de la obra original, lo que en un principio me llevó a recordarme de una operación similar que llevó a cabo Gus Van Sant en 1998 con su versión de Psicosis fotocopiada de la de Hitchcock de 1960. Pero lejos de aquel ejemplo con mejores intenciones que buenos resultados, en este caso Spielberg también tiene sus mejores intenciones con la obra primigenia, y consigue plasmarlas con adecuados resultados, demostrando aquello de que "la veteranía es un grado", y que con 75 años (desde el pasado 18 de diciembre) es un director lo suficientemente versatil como para permitirse hacer el remake de todo un clásico, después de haber tocado a lo largo de su carrera casi todos los géneros, y encima hacerlo de forma destacable.

Al tener yo tan reciente el visionado de la película de 1961 y de esta nueva versión de 2021 se me hizo más patente que, lejos de ser un mero duplicado sin entidad propia, Spielberg actualiza conceptos e ideas pero sin que los mismos lleguen a ensombrecer el tono clásico de la historia, que se sigue manteniendo. Entre esas novedades está un elenco más acorde a la etnia de los personajes que tienen que interpretar (algunos dirán que más "politicamente correcto"), permitiéndose además que en ciertos momentos se expresen en español (en la versión original) como evidente detalle de su procedencia (serían originarios de Puerto Rico) Como guiño hacia el film de 1961 se ha cambiado el personaje de Doc (interpretado allí por Ned Glass) por el de Valentina, interpretado aqui por una vibrante Rita Moreno que ya estuvo en la versión original, entonces encarnando al personaje de Anita.

Del reparto de este remake el nombre más conocido sería el de Ansel Elgort, a quien descubrí por su papel protagonista en Baby Driver, pero la sorpresa creo que es en femenino y por partida doble: la debutante Rachel Zegler encarnando a la protagonista María, y Ariana DeBose dando vida a Anita consiguen destacar sobre un bastante adecuado elenco: la primera enamorando al público y la segunda insuflando toda la fuerza y energía que requiere su personaje. EN CONCLUSIÓN estamos ante un remake que, respetando la obra original, la moderniza en ciertos detalles pero manteniendo su clasicismo, al mismo tiempo que confirma que Spielberg tiene la suficiente veteranía para atreverse con el género que le de la gana (aunque ya el Anything goes que cantaba Kate Capshaw al inicio de Indiana Jones y el templo maldito dejaba ver que podía manejarse con los musicales, y que sólo era cuestión de tiempo)
=================================

viernes, 1 de octubre de 2021

SIN TIEMPO PARA MORIR, y casi sin para aburrir (crítica sin spoilers)

Otra de las muchas películas damnificadas por la pandemia mundial del Coronavirus fue Sin tiempo para morir, el quinto film de la saga Bond con Daniel Craig interpretando al protagonista. Ya de por si en un inicio tenía que haberse estrenado a finales de 2019, cuando su director era Danny Boyle, el cual al final abandonó dejando el camino abierto para Cary Fukunaga, que ha sido al final el responsable del presente film. No había mayor problema y por eso se retrasó hasta primavera del 2020, pero a partir de ahi el problema fue la citada pandemia mundial que retrasó el estreno de esta película hasta en tres ocasiones: finales del 2020, primavera del 2021 y la definitiva en octubre de 2021.

Con esta Sin tiempo para morir el actor Daniel Craig se convierte en el Bond más duradero de las últimas décadas, y el tercero respecto a Roger Moore (que lo encarnó en siete ocasiones) y Sean Connery (que lo hizo en seis ocasiones oficiales, siete si contamos la apócrifa Nunca digas nunca jamás) Los cuatro títulos precedentes a este fueron Casino Royale, Quantum of solace, Skyfall y Spectre, siendo el metraje en todos los casos bastante superior a las dos horas (con la excepción de Quantum of solace, que se podría catalogar desde mi punto de vista como el más flojo de la etapa Craig), pero en este caso con esta cinta marcamos record con 163 minutos de metraje, lo que la convierte en la entrega más extensa de toda la franquicia hasta el momento. Pese a dicha extensión, el resultado final es tan acertado que cuesta imaginar por donde irá en futuras entregas.
 
Lo que ha caracterizado al Bond de Daniel Craig ha sido dotarle de un valor humano del que carecía en sus encarnaciones precedentes, el cual se ha ido desarrollando al mismo tiempo que la franquicia ofrecía todos esos detalles tan habituales a la misma que vienen a ser su seña de identidad. Esa evolución ha sido más o menos palpable en cada nueva entrega, pero en esta 25ª película del popular agente y (como ya he dicho más arriba) la 5ª y última de Daniel Craig, se nos ofrece un cierre espectacular cuyas connotaciones resulta innegable que causarán polémica, pero que ha ofrecido una inesperada (y sensata) novedad a un producto de casi seis décadas de antigüedad en la gran pantalla, que nació en una época pretérita ya bastante superada. A partir de aqui se intuye un cierto cambio si se quiere mantener la continuidad planteada en las cinco entregas de Craig (con elementos que las entrelazan), aunque también cabe la posibilidad de algún tipo de reboot, pero quisiera decantarme más por lo primero que por lo segundo ya que haría oficial la teoría esa de que James Bond es un nombre clave que ha ido pasando de generación en generación y de agente en agente.
 
Pero en lo referente a esta Sin tiempo para morir hay que admitir que ofrece todo lo que uno espera del personaje y al mismo tiempo consigue ir más allá, con ciertos detalles que podrán gustar más o menos, pero que sin duda alguna no dejarán indiferente a nadie. Dicho propósito requiere mucho trabajo, y de ahi la extensa duración de 163 minutos, que se notan por el tiempo que representa pero que logran mantener la atención del espectador en (casi) todo momento, habiendo ciertas irregularidades en su ritmo perfectamente achacables a sus ambiciosas pretensiones. Los villanos de esta larga franquicia se han caracterizado primero por la Guerra Fría vigente en el momento en que nació el personaje, para luego evolucionar en megalómanos con ansias de dominación mundial, siendo (más o menos) en esta última categoría donde se podría englobar al encarnado aqui por Rami Malek, al que en inicio parece moverle la venganza, pero que en el tramo final demuestra unas ambiciones más amplias (y genocidas) Quizás no sea el mejor al que se ha enfrentado 007, pero sin duda marcará el hecho trangresor al que lleva al popular personaje casi 60 años después de su primera aventura en cines.
 
Si algo ha caracterizado a esta franquicia han sido detalles que han permanecido a lo largo de los años, siendo uno de ellos el de un prólogo previo a los títulos de crédito iniciales, que en este caso se extiende durante los 30 minutos iniciales, pero que funciona de forma realmente notable. Tras él, y la canción de Billie Eilish carente del gancho de temas precedentes, asistimos a una historia que recoge tanto elementos previos como novedosos, dando la sensación de que evoluciona por tramos que se entrelazan para formar un conjunto (más o menos) homogéneo. Se recuperan ciertos conocidos a esta saga como son Léa Seydoux repitiendo su papel de Madeleine ya visto en Spectre (y haciéndolo más trascendental), Naomie Harris como Moneypenny, Ralph Fiennes como M, Ben Wishaw como Q Jeffrey Wright como Felix Leiter y un cameo de Christoph Waltz como Blofeld. A ellos se añaden dos presencias femeninas contrastadas: por un lado la agente que en inicio consta como relevo de Bond (encarnada por Lashana Lynch) y por otro una Ana de Armas que vuelve a coincidir con Craig tras Puñales por la espalda, y que ofrece una actuación realmente destacable.
=================================
  • FICHA TÉCNICA y SINOPSIS en IMDB (en inglés) y FilmAffinity (en español)
  • FECHA DE ESTRENO EN ESPAÑA: 1 de octubre de 2021.
  • Galería de posters por este enlace.
  • LO MEJOR: Es un magnífico cierre a la etapa de Daniel Craig como 007 en su sabia conjunción de elementos clásicos de la franquicia con novedades transgresoras pero (desde mi punto de vista) acertadas.
  • LO PEOR: Su extenso metraje hace que el ritmo tenga ciertos altibajos, por otra parte comprensibles.

miércoles, 22 de septiembre de 2021

CRY MACHO, una road-movie con gallo peleón (crítica sin spoilers)

Creo que a partir del éxito a finales de la década de los setenta de películas como Star Wars o Tiburón se marcó un antes y  un después en el mundo del cine, quedando como "clásico" todo lo anterior a dicho periodo. Eso supongo que es la causa de que el nonagenario Clint Eastwood esté catalogado como uno de los últimos directores de cine clásico que quedan en activo, ya que su estilo tiene poco de aquello que sirve como referencia a los actuales blockbusters de temporada. 
 
Pero el señor Eastwood ya está muy mayor (91 años cumplió el pasado mes de mayo), y yo mismo tenía ciertas dudas cuando fuí a ver en 2019 Mula de si no sería quizás su último trabajo como director y actor (me alegra haberme equivocado, siendo la prueba esta Cry Macho... que de nuevo deja la duda sobre su futuro, ya que no hay que olvidar la edad de Clint) Aún así reconozco el mérito de haber rodado con su edad esta película en plena pandemia mundial por Coronavirus.

Estrenada en Estados Unidos este pasado fin de semana ha sido un nuevo fracaso para Warner tras los decepcionantes resultados de Reminiscencia y Maligno en la taquilla de aquel pais, lo que algunos achacan a ese estreno "compartido" con HBO Max en Estados Unidos de los films de Warner estrenados desde Wonder Woman 1984. De hecho esa secuela no cosechó una recepción parecida a la de su primera entrega, y en ese género de los superhéroes un ejemplo bien reciente podría ser El escuadrón suicida y sus pésimos resultados en la taquilla americana, en ambos casos siendo títulos de la citada Warner, que ahora mismo tiene cuatro films entre los 15 que peores inicios han tenido en su estreno en más de 3000 cines por territorio norteamericano. Pero como los resultados de taquilla no tienen nada que ver con la calidad de una película, he decidido verla recordando lo que el propio actor decía en su papel de Harry Callahan en La lista negra: Las opiniones son como los culos, todo el mundo tiene una.

Aunque en inicio lo desconocía, este proyecto data de hace casi medio siglo, ya que N.Richard Nash (su autor) escribió en la década de los años setenta un guión titulado Macho que le fue rechazado dos veces por la 20th Century Fox. Ante esa negativa lo transformó en novela, editada en 1975 con el título de Cry Macho, que luego si logró vender a varios estudios. Se intentó en varias ocasiones de llevar esta historia a la gran pantalla con posibles protagonistas como Roy Scheider, Burt Lancaster o Arnold Schwarzenegger (hubiera sido curioso ver el resultado con este último), e incluso se valoró al propio Clint Eastwood como opción, si bien rechazó protagonizarla en 1988, quizás esperando el momento oportuno para poder ejercer la triple labor que tiene aqui como productor, director y protagonista. Respetando el guión de N.Richard Nash también ha colaborado en la escritura del libreto de este film Nick Schenk, que ha sido el responsable de los de Gran Torino y Mula, los dos trabajos actorales previos de Eastwood al del presente film.

Cry Macho puede no convencer a aquellos que esperen una obra maestra por parte del señor Eastwood, ya que es bastante evidente que estamos ante un título menor dentro de su amplia filmografía, pero que pese a todo consigue ser disfrutable aunque no llegue al nivel de clásicos suyos como Sin Perdón o Million Dollar Baby (por los que fue premiado en los Oscars) La mano de Schenk en el guión se nota, al tener elementos coincidentes con los dos films previos del Eastwood actor: al igual que en Gran Torino aqui tenemos a un protagonista veterano que tendrá que lidiar con un niño, en una relación tensa que poco a poco irá mejorando, y al igual que en Mula parte de la historia vendría a seguir el ejemplo de road-movie donde más importante que el viaje que emprenderán los protagonistas es como ese periplo los cambiará emocionalmente, a lo que sumar que la misión le viene encomendada por el personaje encarnado por Dwight Yoakam (su jefe en la ficción) que cree que un anciano no levantará sospechas para lo que tiene que realizar.
 
Situada en origen en 1979 la historia nos presenta a Mike Milo (encarnado por Clint Eastwood), que en sus buenos (y ya pasados) tiempos fue un héroe del rodeo y un afamado criador de caballos, pero que ahora malvive con el recuerdo de sus viejos éxitos. Pese a todo su exjefe Howard Polk le pide a Milo que le haga un último favor (aunque sólo sea como pago por la ayuda económica que le prestó en el pasado): tendría que ir a Ciudad de México a por un hijo suyo llamado Rafael o Rafo, que dejó hace un tiempo, y convencerlo para que vaya con su padre a Estados Unidos. El problema vendrá cuando al llegar descubra que el niño que venía a buscar es ya un adolescente de 13 años (encarnado por Eduardo Minett) que se gana la vida en peleas de gallos con uno que sería su mascota fiel y al que ha llamado Macho. A partir de ahi comienza una ajetreada road-movie donde el anciano, el adolescente y el gallo vivirán toda clase de peripecias, en una historia en el fondo tan sencilla como eficiente, dejando un emotivo cierre a la carrera actoral de Eastwood.
=================================
  • FICHA TÉCNICA y SINOPSIS en IMDB (en inglés) y FilmAffinity (en español)
  • FECHA DE ESTRENO EN ESPAÑA: 24 de septiembre de 2021.
  • LO MEJOR: Que con 90 años haya rodado y protagonizado Eastwood una película es digno de mérito, y aunque el resultado final dista de ser excepcional (aunque tampoco tiene ninguna obligación de que todo lo suyo sea siempre magistral), otros muchos quisieran la solvencia que demuestra aqui en un relato sencillo pero funcional, que no tiene nada que ver con el estímulo constante y el efectismo del cine contemporáneo.
  • LO PEOR: Todo lo relacionado con México peca quizás de estereotipos, anacronismos y maniqueismos, si bien el veterano realizador lo resuelve con una correcta prestancia. En algunos momentos roza una cursileria que se les puede antojar anticuada y rancia a los fans del Eastwood más expeditivo, pero que a mi no me disgustó.

viernes, 6 de agosto de 2021

EL ESCUADRÓN SUICIDA, una salvaje gozada (crítica sin spoilers)

El universo Marvel en cines es algo digno de mérito porque de momento es una fórmula ganadora (luego que los títulos gusten más o menos eso ya va a gusto de cada espectador) Es por eso que Warner hace un nuevo intento (y van ya...) para montar algo más o menos parecido con esta El escuadrón suicida, que se supone que sería en inicio secuela del Escuadrón Suicida estrenado en 2016, cinta que aunque tuvo el éxito suficiente para que fuera rentable, cosechó críticas bastante negativas.

En el mismo año en que se ha visto la versión del director de Liga de la Justicia (que creo que mejoró de lo que fue en su origen "apañado" por Joss Whedon a lo planteado al final por Zack Snyder... si bien también es cierto que se le fue la mano a la hora de darle su "toque" personal), el director David Ayer, responsable del film de 2016, reclama que se le permita algo parecido, lo cual parece poco probable ya que este film es también un reboot para corregir los errores de la anterior. 
 
De ahi el fichaje de James Gunn como director, avalado por el tono que le otorgó a sus Guardianes de la Galaxia de Marvel, y asegurarse (aunque no es la única que repite) de tener en el reparto a la Harley Quinn de Margot Robbie, que fue sin duda el mayor acierto del film precedente. El resultado final ha sido una inesperada sorpresa para un servidor.

Lo primero que llama la atención es como juegan con el espectador, mostrando personajes que parece que puedan tener alguna importancia en la trama para después despanzurrarlos sin miramientos. De esta manera supongo que se ironiza sobre la intrascendencia que tienen muchos de los personajes que aparecen por aqui, algunos de ellos salidos de comics de los que ahora mismo tan sólo tendran recuerdo los fans más acérrimos. Pero mientras que en la película de 2016 esos personajes esquemáticos eran más un estorbo que una necesidad, aqui se transforman en un chiste más dentro de esa gran broma grotesca con la que se podría describir este film. Y es que Gunn tiene en este caso la libertad que parece que no tuvo Ayer, y realiza aqui una película (siempre en sentido positivo) muy bruta, zafía, grosera, escatológica y sangrienta a la par que tremendamente divertida y plagada del humor más negro que quepa imaginarse (tiene muchos detalles que es dificil imaginarlos en el universo en cine de Marvel con el sello de la Disney)

Intentando darle a la película un tono digno de su calificación R (lo que admite todas las barbaridades verbales y físicas que se pueden degustar en su metraje), el bueno de Gunn sigue por el camino abierto por sus Guardianes de la galaxia con el tono gamberro de Deadpool, ofreciendo también un personaje tan entrañable como su Groot de Marvel, representado aqui en ese King Shark que en su versión original tiene la voz de Sylvester Stallone. Y no sería el único personaje con el que te acabas encariñando, ya que el Hombre Moteado, el Pacificador, Ratonera 2 o Bloodsport son otros (de los muchos de su amplio elenco) con los que también logra que el espectador empatice y simpatice, más allá de que este último (a cargo de un solvente Idris Elba) pueda parecer una versión retocada del que interpretó Will Smith en la película de 2016. Aún así la relación casi paterno-filial que se establece entre él y Ratonera 2 demuestra que también hay sentimiento en esta película y no tan solo el muy gratificante tono grosero, cafre y vulgar en el que está envuelto el conjunto.

La premisa argumental para poner en movimiento a todos estos inadaptados sociales con poderes es muy sencilla: en este caso un ficticio pais latinoamericano llamado Corte-Maltese ha sufrido un golpe de estado y la fuerza especial de Amanda Waller (a cargo de otra que repite, la actriz Viola Davis) tiene que ponerse en movimiento para cumplir allí una misión, en un inicio tan peliaguda como peligrosa, que en su tramo final se transformará en una batalla contra un enemigo externo tan gargantuesco como coherente hacia el tono grotesco y macarra que tiene la película en todo momento. Es también ahi cuando El escuadrón suicida deja más patente su moraleja en defensa de los más desfavorecidos y en contra de los chanchullos gubernamentales, tras un desfile de personajes tremendamente extravagantes (cada cual a su manera, ya que el elenco es variado) con los que se juega manteniendo la duda razonable durante todo su metraje de los que llegarán al final, que ya adelanto (sin hacer spoiler) que serán más bien pocos.
============================
  • FICHA TÉCNICA y SINOPSIS en IMDB (en inglés) y FilmAffinity (en español)
  • FECHA DE ESTRENO EN ESPAÑA: 6 de agosto de 2021.
  • ESCENAS POST-CRÉDITOS: Hay dos, una justo antes de los títulos de crédito y otra al final de los mismos, en ambos casos dando una segunda oportunidad a personajes que creiamos muertos, siendo en el segundo caso coherente con los planes de la productora.
  • Galería de posters por este enlace.
  • LO MEJOR: Su tono gamberro, cafre, bruto, grosero (algo así no se visto nunca en los films de Marvel hasta la fecha) y plagado de un humor negro y realmente salvaje.
  • LO PEOR: Su ritmo no resulta uniforme, con momentos realmente brillantes e hilarantes pero otros donde el desmadre del que hace gala no funciona igual de bien.