FICHA TÉCNICA
Título: Harry Potter y el misterio del príncipe
Título original: Harry Potter and the half-blood prince
Dirección: David Yates
País: Reino Unido, Estados Unidos
Año: 2009
Fecha de estreno: 15/07/2009
Duración: 153 min.
Género: Romance, Aventuras, Intriga, Fantástico
Calificación: No recomendada para menores de 7 años
Reparto: Daniel Radcliffe, Emma Watson, Rupert Grint, Michael Gambon, Alan Rickman, Helena Bonham Carter, Jim Broadbent, Robbie Coltrane, Timothy Spall, David Thewlis
Guión: Steve Kloves
Distribuidora: Warner Bros. Pictures
Productora: Warner Bros. Pictures, Heyday Films
SINOPSIS
Harry Potter (Daniel Radcliffe) ya está en el sexto curso de Hogwarts, que volverá a ser muy especial. Primero, por la llegada de un nuevo profesor llamado Horace Slughorn (Jim Broadbent). Y segundo, por el hallazago de un libro de recetas para elaborar pociones mágicas que perteneció al misterioso príncipe mestizo.
CRÍTICA
Una década con Harry Potter, ese es el tiempo que habrá pasado entre Harry Potter y la Piedra Filosofal (2001) y Harry Potter y las Reliquias de la Muerte, parte II (estreno en 2011). Y ya se nota que se aproxima el final en esta, la sexta película de la saga, basada a su vez en el sexto título de J.K.Rowling. Y por fin las cosas se animan.
Algo que personalmente no me gustó del quinto libro fue su total insustancialidad, ya que esperaba yo que lo que sucede en el sexto hubiera empezado antes, siendo La Orden del Fenix un simple relleno antes de abocar la historia a la parte oscura donde está ahora inmersa. En el film se consiguió, eso si, un espectáculo más entretenido de lo que fue para mi la obra literaria, si bien con la polémica de todo el material obviado (no en vano el libro más extenso hasta la fecha daba como resultado la película más corta de la saga, también hasta la fecha). Pero igualmente parte del flojo resultado de la quinta aventura del famoso mago, al menos en su versión cinematográfica, fuera la ausencia de Steve Kloves en los guiones, labor que había desempeñado en las cuatro películas anteriores, sustituido en La Orden del Fenix por Michael Goldenberg.
El retorno de Steve Kloves se nota en El misterio del príncipe más que nada por una duración que ya la emparenta más con el resto de películas de la saga: 153 minutos. Pero la pregunta es la misma... ¿de verdad es necesario que sean tan largas las películas de la saga Potter? Cuando se estrenó la primera todo el mundo se llevó las manos a la cabeza, porque si adaptar un libro de unas 256 páginas llevaba dos horas y media, ¿cuanto no llevaría la de las posteriores entregas, progresivamente de mayor extensión? Y es que J.K.Rowling dejó bien claro que las adaptaciones tenian que ser fidedignas...
Logicamente eso debió de ser así hasta que se dió cuenta de que tenía entre manos una franquicia que iba a dar dinero de una manera u otra. Eso se notó ya bastante en La Orden del Fenix y otro tanto vuelve a suceder aqui. O sea, el espíritu de la obra literaria si está en la película... pero lo que no hay es una traslación fidedigna de la misma. Pese a ello el retorno de Kloves en el guión dota de un mayor embite a esta entrega, especialmente en escenas tan conseguidas como la de la cueva de los Inferi con Dumbledore y Harry (si bien los citados seres me recordaron bastante al Gollum de la saga de El Señor de los Anillos). Y es que citar la obra de Tolkien viene a relación por los paralelismos que hay entre ambas: no en vano ambas franquicias comenzaron su andadura en pantalla grande en 2001, y comparten muchos elementos fantasiosos comunes. Pero no es la única saga con la que encontrar paralelismos: atención a la escena final de esta sexta película con los personajes principales resueltos a encaminarse hacia la aventura que les espera, tras la pérdida de uno de los personajes más emblemáticos de la saga. Dicha escena me recordó mucho a la final de El Imperio Contraataca, también con los personajes principales en un estilo de conversación y en un estilo de escena realizada bajo el mismo esquema. Y eso por no hablar de que Potter es El Elegido, lo cual recuerda bastante a la misma categoria que tenía el Neo de Matrix.
Lo que eché en falta en El misterio del príncipe fue la presencia de Voldemort. Como personaje está presente pero nunca aparece aqui, siendo sus seguidores los que se llevan el máximo protagonismo. Entre ellos destacaría a Draco Malfoy (Tom Felton) que sabe mostrar muy bien las dudas entre lo que está obligado a hacer y lo que de verdad haría, así como un actorazo como Alan Rickman o una perfecta Helena Bonham-Carter como la desequilibrada Bellatrix Lestrange (y es que lo mejor de la saga Potter han sido sin duda los veteranos actores que han colaborado en la misma: Maggie Smith, Richard Harris, Brendan Gleeson, Kenneth Brannagh, Emma Thompson o los citados Alan Rickman y Helena Bonham-Carter entre otros muchos, a los cuales se les une en esta película Jim Broadbent en la piel de Horace Slughorn).
Lo más flojo vuelve a estar en los actores jóvenes, y es que el resultado de todos ellos se puede calificar como simplemente correcto (con excepción de Frank Dillane como el joven Tom Riddle, tan tenebroso como el personaje se merece), si bien Rupert Grint (Ron Weasley) no se hace tan cargante como en el film precedente. Sus relaciones adolescentes y sus escarceos amorosos componen quizás la parte más típica y tópica de la película, que no dejaría de ser una variante fantástica de argumentos de instituto vistos hasta la saciedad en films como High School Musical y similares. Por su parte Daniel Radcliffe peca quizás de poca expresividad, ya que el ataque contra Snape tras los sucesos de la torre me dió más la sensación del berrinche de un niño malcriado que del verdadero dolor por la pérdida acontecida. Lo que pasa que el principal problema de la película sería su falta de novedad en el sentido de que nos da lo que esperamos, pero ya no sorprende tanto como la primera (donde se nos presentó todo el universo potteriano) o la tercera (a mi gusto aún la mejor película de toda la franquicia, ya que no en vano adapta el mejor de todos los libros de la saga)
LO MEJOR: Toda la parte de la película relacionada con el regreso de Voldemort y sus acólitos, con especial mención a la escena de la cueva de los Inferi, lo mejor del film. Y todos los actores veteranos de la saga, sin duda uno de los puntos más favorables de la misma.
LO PEOR: La parte "adolescente" de la película, más tópica y típica. Y los actores más jóvenes, simplemente correctos (con excepción del joven Tom Riddle, realmente tenebroso).