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miércoles, 30 de diciembre de 2020

Lo mejor y lo peor del fatídico y pandémico 2020

Por culpa de la pandemia del Coronavirus que ataca a la humanidad desde la pasada primavera no ha habido casi estrenos de cine destacables ya que a partir de que se desencadenó esto el pasado mes de marzo vino una continua sucesión de retrasos sobre retrasos dejando el panorama de este año a un nivel paupérrimo, al menos para los que (como es mi caso) disfrutamos del cine en una sala de cine. Eso me ha permitido disfrutar de reestrenos con los que he descubierto desde PARÁSITOS (que estuvo a punto de ser la mejor película de este año si no fuera porque se estrenó en 2019... y porque llegó SOUL casi al final de este 2020) hasta JUDY (que le otorgó un merecido Oscar a su protagonista femenina) pasando por REC (que ya ví en su día pero que volví a verla en el formato sensorial 4DX en el que también pude disfrutar de WONDER WOMAN 1984

La citada secuela del personaje de los comics DC fue junto con TENET los únicos grandes estrenos que llegaron a salas de cine enmedio de la pandemia, con la idea de atraer a un público que en ambos casos no respondió como sus responsables esperaban. No hay mal que por bien no venga, porque ante la escasez de estrenos decidieron por fin estrenar LOS NUEVOS MUTANTES, película que estuvo en cola de espera durante años hasta que al final vió la luz. No fue el único título de superhéroes, aparte de la antes citada Wonder Woman 1984, ya que a principios de año llegó AVES DE PRESA (que me convenció) y BLOODSHOT (que no lo hizo tanto)

Ademas de volver a ver la citada REC, también pude disfrutar de dos películas españolas tan dispares como MALASAÑA 32 (que aplicaba el estilo de la franquicia Expediente Warren a un caso español) y EXPLOTA EXPLOTA (que aplicaba el estilo de las dos entregas de Mamma Mia pero con el repertorio de Raffaella Carrà) Luego dentro de esas peliculas que se cuelan entre año y año tendría que citar a JOJO RABBIT (que ví a finales del 2019 en pase de prensa aunque no se estrenó hasta principios del 2020) y PENÍNSULA (la secuela de Tren a Busan que tenía que estrenarse a finales de este año pero que al final lo hará a principios del 2021) También se estrenó SONIC: LA PELÍCULA que al final no fue el horror que muchos se pensaban sino un film ligero y entretenido con el que pasar el rato.

Sin olvidarme de ENOLA HOLMES (que tenía que haberse estrenado en cines pero lo hizo en Netflix), ONWARD (el otro film de Pixar que llegó este año aparte de Soul) o incluso PINOCHO (una bastante fiel adaptación del cuento clásico), viendo ahora este año en perspectiva la más profética sería EL HOMBRE INVISIBLE y no por nada sobre la película como tal SINO SOBRE SU ESLOGAN (Lo que no ves puede hacerte daño) que bien podría considerarse una metáfora predictiva de la pandemia que tendriamos expandida por todo el planeta pocas semanas después. Por eso que con una lista de títulos tan variados, ¿como elegir lo mejor de un año tan paupérrimo, en el que las plataformas de streaming han visto la panacea de un público que no podía ir a las salas de cine pero demandaba estrenos? (en mi caso de ahi sólo añado Enola Holmes y Soul de Netflix y Disney Plus respectivamente) Ha sido el año en que menos he ido al cine desde que existe este blog, por lo que al final el escueto ranking queda tal que así:

  1. Soul
  2. Parásitos
  3. JoJo Rabbit
  4. REC
  5. Wonder Woman 1984
  6. Los nuevos mutantes
  7. Aves de presa
  8. Onward
  9. Judy
  10. Tenet
  11. El hombre invisible
  12. Enola Holmes
  13. Pinocho
  14. Malasana 32
  15. Explota explota
  16. Península
  17. Sonic La película
  18. Bloodshot
Nota: Mis críticas de cada una de estas películas se pueden leer en los enlaces que he dejado en los títulos en mayúscula de cada una de ellas en el texto inicial.

viernes, 18 de diciembre de 2020

WONDER WOMAN 1984 en formato 3D-4DX (crítica sin spoilers)


Que el año 2020 no lo olvidaremos es algo obvio a tenor de esa maldita pandemia por el Coronavirus que en el apartado cinematográfico ha provocado multitud de retrasos en casi todos los estrenos masivos que tenian que haber llegado desde la pasada primavera hasta este momento. Con el futuro aún incierto las estrategias más allá de los sucesivos retrasos han sido las de Disney (echando mano de su plataforma de streaming para algunos de los títulos que tenían que haber llegado a las salas de cine en este periodo de tiempo) y Warner, que estrena Wonder Woman 1984 y TODOS sus estrenos para 2021 de forma paralela en salas de cine y en la plataforma elegida por ellos: HBO Max. A la espera, en el momento que escribo esta crítica de lo que deparará el futuro, se agradece un título de relevancia en la cartelera, sobretodo si se trata de la secuela del mejor film (hasta la fecha y según mi humilde opinión) que ha creado ese irregular universo cinematográfico de DC intentando seguir los pasos del más afortunado de Marvel.
 
Lamentablemente esta película ya arrastra el handicap de que los propios trailers y avances han desvelado detalles como el retorno de Steve Trevor (de nuevo encarnado por Chris Pine) cuando se supone que desaparecía en la anterior entrega, que además se situaba durante la Primera Guerra Mundial (ya que como revela el mismo título de esta secuela, ahora la acción avanza hasta el muy orwelliano 1984) Otro problema radica en una duración superior incluso a la del primer film, que ya en aquel caso quedó demostrado que no se empleaba justamente en desarrollar algunos conceptos que manejaba, por lo que cabe preguntarse si un reajuste de su metraje no hubiera sido algo más beneficiosa para esta Wonder Woman 1984. Resulta innegable que ante la carestía de estrenos que citaba al inicio se agradece algo así, pero al destacable disfrute que nos ofrece esta película, y que Patty Jenkins tras las cámaras y Gal Gadot de nuevo como protagonista saben repetir los aciertos que tuvo el primer film, sus dos horas y media de duración podían haber sido reducidas.

Casi toda la película justifica su existencia en un macguffin que funciona como el del clásico relato La pata de mono de W.W.Jacobs (al que hacen incluso mención para hacerlo más evidente) de tal forma que te concede lo que deseas pero pagarás un alto precio por ello. Como resulta evidente el retorno del personaje antes citado se justifica con dicha premisa, lo cual puede parecer coherente en la estructura de la misma película, pero que al mismo tiempo ofrece los momentos más bobalicones ya que su asombro ante el mundo moderno no deja de ser un estereotipo visto hasta la saciedad: el típico forastero fuera de su tiempo que tiene que acostumbrarse a nuevas costumbres que para él resultan desconocidas. La época en la que se ambienta este film se vuelve decisiva porque la Guerra Fría que aún estaba vigente por aquel entonces provocaba que los dos frentes militares (el norteamericano y el soviético) pugnaran por tener la hegemonía nuclear, siendo eso lo que lleva a la amenaza del colapso de la civilización, resuelto aqui apelando a nuestra humana bondad como virtud.

Aunque se le ha visto la cara escasas veces en dicha serie televisiva, el protagonista de The Mandalorian (el actor Pedro Pascal) tiene a su cargo al villano Maxwell Lord, aqui tan solo Max Lord, que en su planteamiento y evolución no resulta extraño percibir tantos y tantos megalómanos con ansias de dominación mundial con los que se ha enfrentado James Bond, aunque si se quiere hilar más fino es posible ver una crítica contra la arrogancia y la prepotencia de Donald Trump, el actual presidente de los Estados Unidos. Se le unirá en sus planes el personaje de Barbara Minerva, al que la actriz Kristen Wiig le otorga una evolución que puede recordar a la que tuvo Selina Kyle en Batman vuelve de Tim Burton, ya que de ser una mujer apocada y miedosa se transformará poco a poco (más acelerado en su tramo final) en la villana Cheetah. Eso le lleva a tener cierto momento de empoderamiento en el que también es facil ver un evidente mensaje antimachista, convirtiéndose en depredadora cuando antes había sido una fragil víctima.

El citado macguffin afectará a todos los personajes del film, pero mientras que Diana se dará cuenta del precio que tiene que pagar por conseguir lo que desea, los personajes de Max Lord y Bárbara Minerva se mostrarán más reacios a ello, debido a que como el sistema parece haberse olvidado de ellos, cuando obtengan el poder para voltear dicha situación no serán capaces de manejarlo correctamente. Eso se puede interpretar como un claro mensaje de que es mejor la honestidad (de la que hace gala la protagonista) que la arrogancia (por parte del duo de villanos, que se regodean gracias a este giro del destino que les ha sido tan beneficioso) El mayor problema, como he citado antes, es lo irregular que resulta esta película debido a su dilatado metraje, lo que se hace muy evidente en su ritmo, pecando (de forma más clara que en su predecesora) de dilatar momentos insustanciales (como por ejemplo en la escena de los fuegos artificiales: un homenaje de Patty Jenkins a su difunto progenitor que resulta tan elegante como prescindible)

Como toda película de superhéroes de los últimos años, este film tiene escena post-créditos aunque en este caso tan sólo una entremedio de los mismos en el que el personaje de Artemisa (¿aparecerá en una hipotética tercera entrega?) sirve para el cameo de cierta actriz que hizo famosa al personaje en la década de los setenta. Asimismo tengo que admitir que si Wonder Woman 1984 es espectacular, eso se aumenta si se ve, como ha sido mi caso, en los cines Filmax Gran Via, donde pude disfrutarla en 3D y 4DX, este último un sistema para disfrutar del cine de forma sensorial con el que en su día ya pude ver la nueva versión de El rey león y el reestreno de REC.
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  • FICHA TÉCNICA y SINOPSIS en IMDB (en inglés) y FilmAffinity (en español)
  • FECHA DE ESTRENO EN ESPAÑA: 18 de diciembre de 2020
  • Galeria de posters por este enlace.
  • LO MEJOR: La buena labor de Patty Jenkins dirigiendo y Gal Gadot de nuevo como Wonder Woman, así como unos villanos más carismáticos que los de su predecesora. También sus escuetas pero bien resueltas escenas de acción (destacando el prólogo de Themyscira) y la épica banda sonora de Hans Zimmer.
  • LO PEOR: Lo forzado del regreso del personaje de Chris Pine, si bien el actor lo resuelve lo mejor que puede, y lo irregular de su excesivo metraje, que extiende momentos más insustanciales en detrimento de otros más trascendentales.