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viernes, 6 de agosto de 2021

EL ESCUADRÓN SUICIDA, una salvaje gozada (crítica sin spoilers)

El universo Marvel en cines es algo digno de mérito porque de momento es una fórmula ganadora (luego que los títulos gusten más o menos eso ya va a gusto de cada espectador) Es por eso que Warner hace un nuevo intento (y van ya...) para montar algo más o menos parecido con esta El escuadrón suicida, que se supone que sería en inicio secuela del Escuadrón Suicida estrenado en 2016, cinta que aunque tuvo el éxito suficiente para que fuera rentable, cosechó críticas bastante negativas.

En el mismo año en que se ha visto la versión del director de Liga de la Justicia (que creo que mejoró de lo que fue en su origen "apañado" por Joss Whedon a lo planteado al final por Zack Snyder... si bien también es cierto que se le fue la mano a la hora de darle su "toque" personal), el director David Ayer, responsable del film de 2016, reclama que se le permita algo parecido, lo cual parece poco probable ya que este film es también un reboot para corregir los errores de la anterior. 
 
De ahi el fichaje de James Gunn como director, avalado por el tono que le otorgó a sus Guardianes de la Galaxia de Marvel, y asegurarse (aunque no es la única que repite) de tener en el reparto a la Harley Quinn de Margot Robbie, que fue sin duda el mayor acierto del film precedente. El resultado final ha sido una inesperada sorpresa para un servidor.

Lo primero que llama la atención es como juegan con el espectador, mostrando personajes que parece que puedan tener alguna importancia en la trama para después despanzurrarlos sin miramientos. De esta manera supongo que se ironiza sobre la intrascendencia que tienen muchos de los personajes que aparecen por aqui, algunos de ellos salidos de comics de los que ahora mismo tan sólo tendran recuerdo los fans más acérrimos. Pero mientras que en la película de 2016 esos personajes esquemáticos eran más un estorbo que una necesidad, aqui se transforman en un chiste más dentro de esa gran broma grotesca con la que se podría describir este film. Y es que Gunn tiene en este caso la libertad que parece que no tuvo Ayer, y realiza aqui una película (siempre en sentido positivo) muy bruta, zafía, grosera, escatológica y sangrienta a la par que tremendamente divertida y plagada del humor más negro que quepa imaginarse (tiene muchos detalles que es dificil imaginarlos en el universo en cine de Marvel con el sello de la Disney)

Intentando darle a la película un tono digno de su calificación R (lo que admite todas las barbaridades verbales y físicas que se pueden degustar en su metraje), el bueno de Gunn sigue por el camino abierto por sus Guardianes de la galaxia con el tono gamberro de Deadpool, ofreciendo también un personaje tan entrañable como su Groot de Marvel, representado aqui en ese King Shark que en su versión original tiene la voz de Sylvester Stallone. Y no sería el único personaje con el que te acabas encariñando, ya que el Hombre Moteado, el Pacificador, Ratonera 2 o Bloodsport son otros (de los muchos de su amplio elenco) con los que también logra que el espectador empatice y simpatice, más allá de que este último (a cargo de un solvente Idris Elba) pueda parecer una versión retocada del que interpretó Will Smith en la película de 2016. Aún así la relación casi paterno-filial que se establece entre él y Ratonera 2 demuestra que también hay sentimiento en esta película y no tan solo el muy gratificante tono grosero, cafre y vulgar en el que está envuelto el conjunto.

La premisa argumental para poner en movimiento a todos estos inadaptados sociales con poderes es muy sencilla: en este caso un ficticio pais latinoamericano llamado Corte-Maltese ha sufrido un golpe de estado y la fuerza especial de Amanda Waller (a cargo de otra que repite, la actriz Viola Davis) tiene que ponerse en movimiento para cumplir allí una misión, en un inicio tan peliaguda como peligrosa, que en su tramo final se transformará en una batalla contra un enemigo externo tan gargantuesco como coherente hacia el tono grotesco y macarra que tiene la película en todo momento. Es también ahi cuando El escuadrón suicida deja más patente su moraleja en defensa de los más desfavorecidos y en contra de los chanchullos gubernamentales, tras un desfile de personajes tremendamente extravagantes (cada cual a su manera, ya que el elenco es variado) con los que se juega manteniendo la duda razonable durante todo su metraje de los que llegarán al final, que ya adelanto (sin hacer spoiler) que serán más bien pocos.
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  • FICHA TÉCNICA y SINOPSIS en IMDB (en inglés) y FilmAffinity (en español)
  • FECHA DE ESTRENO EN ESPAÑA: 6 de agosto de 2021.
  • ESCENAS POST-CRÉDITOS: Hay dos, una justo antes de los títulos de crédito y otra al final de los mismos, en ambos casos dando una segunda oportunidad a personajes que creiamos muertos, siendo en el segundo caso coherente con los planes de la productora.
  • Galería de posters por este enlace.
  • LO MEJOR: Su tono gamberro, cafre, bruto, grosero (algo así no se visto nunca en los films de Marvel hasta la fecha) y plagado de un humor negro y realmente salvaje.
  • LO PEOR: Su ritmo no resulta uniforme, con momentos realmente brillantes e hilarantes pero otros donde el desmadre del que hace gala no funciona igual de bien.

martes, 25 de diciembre de 2018

LA IMPOSIBLE PATRULLA-X: REVOLUCIÓN, PUNISHER MAX: NOCHE DE PAZ y DOCTOR WHO: CUATRO DOCTORES (reseñas)

En mi humilde opinión este tomo de La imposible Patrulla-X titulado Revolución me ha dado la misma sensación que esas películas-"evento" que cuando se estrenan parece que opten a ser el no-va-más y que luego son tan solo films sencillos y más o menos entretenidos, pero para nada tan apoteósicos como daban a entender. ¡Ojo!, no quiero decir que sea un mal comic, se lee y resulta más bien ameno, pero a los nuevos mutantes que se unen a la historia creo que les falta el carisma de los clásicos.

Esta segunda serie de los X-Men a cargo de Brian Michael Bendis se puede afirmar que sería "pareja" con la de La nueva Patrulla-X que en su momento reseñé por aqui, pero a diferencia de aquella aqui no hay nada de especial relevancia hacia el universo de estos personajes más allá del hecho de ver a Cíclope como un proscrito en un grupo donde los adultos del mismo se completarian con Magneto y Emma Frost, si bien en este tomo se ahonda (quizás en exceso) en el personaje de Magik (la hermana de Coloso)

Todo lo que rodea a los miembros con más "solera" no tiene su equivalente entre los nuevos "afiliados" (en donde hay desde un sanador hasta otro que expulsa bolas doradas, por poner dos ejemplos) ya que dichos personajes no aportan nada de la más mínima relevancia al conjunto y bien podrian ser prescindibles sin que el resultado final se resintiera. Resultando más interesante todos los entresijos de los mutantes más conocidos (con el detalle de tener sus poderes "rotos") frente a los nuevos miembros, es justo destacar el trabajo de Chris Bachalo y Frazer Irving en el apartado gráfico de los números recopilados en este volumen, lo que ayuda a hacer de ellos una lectura entretenida.
El tomo de Punisher Max titulado Noche de paz podía dar la sensación de ser una lectura muy adecuada para las fiestas navideñas, pero al final ha sido tan solo un mero entretenimiento, y casi diría que quizás un tanto justito. Se trata de cuatro historias independientes, con todos los tópicos que uno suele asociar a las andanzas de este personaje, de las cuales dos transcurren en la época navideña (tercera y cuarta), lo que justifica el título de este recopilatorio.

En la primera historia Punisher ayudará a un antiguo compañero de Vietnam para acabar con una banda que está asolando su pueblo, bajo lo que se esconden intereses particulares. En la segunda (la que más me gustó) un anódino ciudadano se convierte en una especie de Norman Bates (con el típico final para un individuo así) En la tercera historia Punisher irá a un orfanato donde se esconde un mafioso, si bien intentará que no mueran inocentes, y todo ambientado en Navidad como el cuarto relato, donde su objetivo será un mafioso metido a sectario y buscar a los responsables de la muerte de un niño.
Aunque por este blog doy buena fé de mi pasión lectora con todo ese inmenso fondo que tengo disponible en las bibliotecas, en ocasiones también me compro comics porque también es cierto que las editoriales más pequeñas no pueden tener tan asegurada su presencia en las bibliotecas (a diferencia de otras como Planeta y Panini por citar dos ejemplos), habiendo ocasiones que merecen dicho apoyo. Ese sería el caso de Fandogamia, que se la "jugó" editando en este pais los comics de la serie de televisión Doctor Who, cuando su relevancia y popularidad nunca ha alcanzado por aqui las cotas de otros sitios (lo que no ha sido obstáculo para que si tenga unos fieles seguidores, entre los cuales me incluyo)

En el Salón del Comic de esta pasada primavera se editó el primer tomo, titulado Revoluciones de terror y donde el protagonista era el Décimo Doctor (encarnado por David Tennant), siendo como ya cité en mi reseña un comic entretenido y complementario para los seguidores de esta serie, si bien con bastante poca trascendencia. Algo similar se puede decir de Cuatro Doctores.

Al ser mi auto-regalo por Navidad (¿quien mejor se conoce a uno mismo... que uno mismo?) lo tenía reservado para leerlo en dicha fecha, hecho que puede venir bien enfocado a lo que sería la estructura de esta historia, ya que si lo leído en ese anterior tomo bien podría tener el estilo de un nuevo inicio de temporada, en este caso la miniserie de cinco números que aqui se recopila bien se podría considerar como uno de los episodios especiales de Navidad a los que esta serie nos tenian hasta ahora acostumbrados (con la actual undécima temporada eso parece haber pasado al día de Año Nuevo

Pero aunque este es un comic entretenido, peca quizás por su exceso de referencias que pueden quedar un tanto fuera de contexto al no haber por estas tierras más que el antes citado Revoluciones de terror, lo que puede llevar a algún lector a preguntarse por la presencia de algunos personajes (surgidos de los comics) o el momento preciso en el que se supone que transcurre esta historia. A eso habría que sumar esa tónica habitual con los crossovers de "cuanto más, mejor", pero que aqui lleva a que no acaben de destacar en una valoración global ninguna de las encarnaciones del Doctor.

Pese a todo es justo señalar que se les consigue dar un trato diferenciador y muy coherente a cada uno de ellos, gracias a un destacado apartado gráfico que sabe captar bien los rasgos y estilos de cada actor que ha interpretado a este personaje en los últimos años, en una historia que si bien puede parecer intrascendente (e incluso algo dilatada en exceso), sin duda se mantiene fiel al espíritu de esta longeva serie.

lunes, 10 de noviembre de 2014

Reseña de la octava (y la más floja) temporada de DOCTOR WHO


No es que ahora no me guste, porque sigue siendo una de mis series preferidas, pero la GRAN afición que tenía yo por Doctor Who se ha perdido, algo evidente tras su octava temporada, la más floja hasta la fecha. Y es que aunque en esta serie sea lógico esa continua evolución con las regeneraciones del protagonista o sus cambios de compañeros de viaje, tengo que reconocer que ya no consigue emocionarme como antes, notándose cierto cansancio y reiteración a la fórmula (ya que ha habido episodios en esta octava temporada que podian haber sido emblemáticos pero que al final acaban siendo tan solo aceptables cuando no más de lo mismo)

En mi caso me enganché a Doctor Who en 2011 en su quinta temporada, y primera de Matt Smith como protagonista (y de ahi en adelante) mientras recuperaba todo lo previo cuando las cadenas de televisión de este pais (en mi caso Boing y el extinto 3XL) se dignaban a emitirla (que esa es otra...) Sobra decir que mi doctor favorito sería David Tennant, si bien el citado Smith no quedaría muy lejos, en especial (y eso SI que me marcó) por sus compañeros de viaje: Amelia Pond, Rory Williams y River Song (sin duda los mejores desde la inicial Rose Tyler de Billie Piper)

Cuando se realizó el cambio a la Clara Oswald de Jenna Coleman lo noté, ya que aunque la metieran dentro de la línea temporal del Doctor, su Chica Imposible se me hizo eso mismo (imposible) y aunque la actriz le pone esfuerzo (algo evidente en esta octava temporada) y belleza (el Doctor sigue teniendo buen gusto) siempre estará para mi un escalón por debajo de la antes citada Amelia Pond, algo más evidente en esta octava temporada con la inclusión de Danny Pink, que ha venido a ser una especie de Rory al que lo mejor que le ha pasado es lo que le pasa en su ¿final? (porque el próximo destino de la serie puede estar en explorar los mundos del Más Allá, uno de los puntos positivos de esta octava temporada)

El gran acierto creo que ha sido Peter Capaldi, ya que tras dos doctores más o menos jóvenes que fueron Tennant y Smith, con el actual se recupera un poco el origen de la serie, ya que coincide que fue a los 55 años cuando William Hartnell encarnó al primer Doctor en 1963, siendo esa misma edad con la que lo ha tomado Capaldi en la actualidad. Su introducción se puede considerar heredera de la del Scrooge de Dickens (y para más enfasis el primer capítulo fue en la época victoriana, junto con otros dos buenos personajes como son Madame Vastra y Jenny) siendo durante toda la temporada un Doctor sin duda menos carismático y más gruñón que en encarnaciones previas.

La contradición entre defectos y virtudes se me hizo especialmente palpable en su doble capítulo final, donde se da explicación al personaje de Missy (a cargo de Michelle Gomez) recuperando a uno de los villanos clásicos del Doctor (The Master), pero es justo ahi cuando una idea a priori atractiva (los muertos se regeneran en Cybermen) queda un tanto difusa por la sobreactuación (y poca credibilidad) de la villana, una especie de versión maligna de Mary Poppins (en su aspecto) Pero pese a ello la serie sigue teniendo momentos de brillantez (aunque cada vez menos), que es lo que anima a seguir con ella.

Puede que haya llegado la hora en que Doctor Who no solo se regenere frente a las cámaras sino también tras ellas, puede que Steven Moffat ya haya dicho todo lo que tenía que decir (no en vano lleva desde el relanzamiento de la serie en 2005, primero como guionista y luego como showrunner)  debido a lo cual en muchas ocasiones esta octava temporada ha dado la sensación de ser más de lo mismo (más daleks, más cybermen, menos sorpresas) pero sin la chispa inicial, en parte perdida por haberse abusado de ciertos recursos que dificultan cada vez más la sorpresa del seguidor.