Los que me seguis desde hace tiempo sabeis la gran afición que me ha nacido este año por la serie Doctor Who, motivada por los recuerdos que tenía de la clásica de la que en mi infancia ví varios capítulos (de los cuales al que más recuerdo es al actor Tom Baker, que encarnó al Cuarto Doctor) Tras disfrutar de una muy notable sexta temporada, ahora habrá que esperar hasta el próximo otoño para la séptima, ya que la idea es hacer coincidir la mitad de ella más toda la octava en 2013, año en el que la serie cumplirá 50 años. A falta de que haya alguna novedad al respecto (ya que la séptima temporada empieza a rodarse en febrero según Matt Smith, lo que significa más de medio año antes del estreno de la misma) lo único que nos queda es el típico especial de Navidad de cada año, que en este caso ha sido este de El Doctor, la Viuda y el Armario.
Tras hacer un claro homenaje a Charles Dickens en el especial del año pasado, el primero para Matt Smith, en este segundo siguen las referencias literarias, ya que no hay que ser muy culto para ver la clara alusión que hay en el mismo título a la obra de C.S.Lewis, creador de la saga de Las Crónicas de Narnia. Pero no es la única, porque el inicio del capítulo enseguida nos hace recordar la primera escena de La Guerra de las Galaxias, cosa que al principio sorprende pero luego mosquea (y es que la "entrada" en la atmósfera más luego lo del traje "al reves" se me antojó demasiado increible y un tanto payasesco respectivamente)