Nadie niega que la serie 
The walking dead ha sido irregular en su trayectoria hasta el momento, caracterizándose por sorprendentes giros de guión que tenian que convivir con momentos de una gran laxitud. Pero en mi caso le he sido fiel desde el principio por lo que es justo valorar cuando la serie acierta, como ha ocurrido en el final de esta temporada 5, que deja las puertas abiertas para una sexta donde, si no me equivoco, tendremos unos villanos inexistentes en el comic: los 
Lobos (
Wolves en inglés, de ahi la 
W marcada en la frente)
¿Y mientras? Pues hemos visto como el instinto de supervivencia levanta las desconfianzas del grupo de 
Rick hacia los habitantes de 
Alexandria, presentados como unos meros ilusos que desconocen el mundo real que hay más allá de sus fronteras. Nuestros protagonistas desconfian porque no olvidan las experiencias con el 
Gobernador de 
Woodbury o lo sucedido en 
Terminus al principio de esta quinta temporada, si bien se ha remarcado un tanto reiterativamente esa pasividad de los miembros de esta nueva comunidad para así dar la razón a 
Rick y los suyos en su manera de obrar.
Habrá quien diga que la serie tiene poco gore, o que los zombis son unos meros secundarios, pero lo importante son los personajes, si bien el desarrollo de los mismos ha sido bastante irregular, aunque destacable de manera clara en casos como el de 
Carol, toda una superviviente que ha superado los duros trances en los que se ha visto inmiscuida, quedando lejos aquel personaje fragil 
que en su segunda temporada vió perder a su hija, algo que en su momento pensé excesivo teniendo en cuenta que nos la presentaron en origen como una mujer maltratada.
Este capítulo final tiene buenos detalles, como la situación extrema en la que se ven metidos 
Daryl y 
Aaron (que sirve de presentación a lo que se adivina como villanos para la temporada 6)... pero en donde resulta un tanto exagerada y forzada la tranquilidad de ambos cuando se encuentran sitiados dentro del coche, ya que por muy curtido que este uno la situación es acongojante se mire como se mire. Pero eso también sirve para que se presente 
Morgan, un viejo conocido de 
Rick, y que parece defenderse con su vara tan bien como lo hace 
Michonne con su katana, por lo que habrá que ver que da de si su personaje en el futuro.
Deanna, la lider de 
Alexandria (así como los miembros de la misma, como ya he indicado) denotan una cierta ingenuidad que se puede emparentar con la que al inicio de la serie tenian el grupo de 
Rick. Pero las diversas andanzas que hemos vivido hasta el momento los han curtido, algo que en la temporada 6 supongo que intentarán transmitir a los habitantes de 
Alexandria para que no se enfrenten a los peligros, zombis o humanos, sin miedo ni temor. Aún así quizás es un poco precipitada la decisión final de 
Deanna hacia 
Rick, donde lo de "ojo por ojo" contra 
Pete, tras lo que este hace, resulta bastante expeditiva (si bien el citado personaje era tan arquetípico que su cercano final estaba más o menos que cantado)
Pero pese a no ser 
The Walking Dead tan redonda como debería (teniendo en cuenta su base en los comics), así como unos personajes de los que no siempre se ha sacado el mejor partido (tras las muertes de 
Tyreese y 
Noah no creo que le quede mucho al 
Padre Gabriel o a 
Sasha, teniendo en cuenta lo que poco que duran los personajes negros en esta serie, en donde siempre que entra uno, caso ahora de 
Morgan, sale otro u otros) me ha asombrado lo maquiavélico de estos 
Lobos, por lo que tengo interes en el previsible choque entre estos y los miembros de 
Alexandria, aunque el grupo de 
Rick supongo que ya se encargará de enseñarles tras los últimos sucesos acontecidos.
CALIFICACIÓN: 7/10 
LECTURAS DE BIBLIOTECA (marzo-2015)