martes, 13 de diciembre de 2022

AVATAR: EL SENTIDO DEL AGUA, excesiva en todo (crítica sin spoilers)

Es indudable que James Cameron es un director megalómano, que se ha caracterizado por realizar películas para impresionar al espectador, algo que se le agradece. Desde los tiempos de Terminator 2 (que en su momento fue la película más cara de la historia del cine) la labor de Cameron le ha hecho decantarse siempre por superproducciones con las que ha conseguido el respaldo de la taquilla, y que en los Oscars de 1998 le reconocieron con las once estatuillas que se llevó su Titanic
 
Tras conseguir situar aquella tragedia marítima como la película más taquillera de la historia, muchos fueron los proyectos por los que se podía haber decantado, pero al final doce años después (en el 2009) presentaba Avatar, su nueva película... y consiguió situarla como la más taquillera de la historia, siendo el único director que ha conseguido los dos primeros puestos de los films más exitosos, hasta la llegada de Marvel (Vengadores: Endgame tiene ahora el segundo puesto, dejando a Titanic en tercera posición)

De nuevo se ha hecho de rogar, porque 13 años después se estrena la secuela de Avatar, que ha tenido paulatinos retrasos desde su fecha de estreno inicial, debido tanto a la complejidad de realizarla como a la compra de Fox (su productora inicial) por parte de Disney, siendo ahora esta última la distribuidora de esta película. ¿Ha logrado Cameron otra secuela ejemplar como hizo con Aliens: El regreso y Terminator 2: El juicio final, esta última además de una saga iniciada por él?
 
La primera película de Avatar admito que me resultó una experiencia cinematográfica IMPRESIONANTE, pero ello no se vió equilibrado con una historia tan solo correcta (con moraleja ecológica) pero tampoco innovadora, estando a medio camino entre Bailando con Lobos y Pocahontas. Las ambiciones iniciales de James Cameron respecto a esta franquicia abarcaban hasta cuatro secuelas, siendo esta la primera de ellas, pero como nada es seguro en el mundo del cine, está presente la posibilidad de que una futura Avatar 3 cierre todos los frentes abiertos, ya que el panorama mundial ha cambiado desde el estreno de la primera en 2009, de forma especial por los efectos de la pandemia y la irrupción con fuerza del streaming. He podido asistir al pase de prensa previo al estreno y cabe indicar que cuando te pones las gafas 3D y comienza la película, comienza también un espectáculo visual ALUCINANTE que convierte a esta secuela en una versión tecnicamente muy mejorada de la primera y en toda una EXPERIENCIA CINEMATOGRÁFICA... con un GRAVE problema.
 
Cuando salía de verla me dí cuenta de la contradicción que es por un lado recomendar esta película con toda la sinceridad por mi parte, y recomendarla en 3D ya que es una película hecha justo para verse en dicho formato, siendo como más se disfruta visualmente... pero al mismo tiempo admitiendo que sus 190 minutos son AGOTADORES. Por más que Cameron defienda la duración de la película argumentando que hay muchos espectadores que se ven maratones de series en bloque sin quejarse, también hay mucha gente que las ve paulatinamente, o incluso si las quiere ver a destajo tiene la opción de parar por cualquier necesidad perentoria (ir al lavabo, comer, etc.), cosa que en el cine logicamente no puedes hacer. Y he ahi la contradicción: visualmente luce muchísimo mejor en una sala de cine en 3D, pero para disfrutarla habría que poder verla paulatinamente, y no empacharse de golpe con ella (por más que tampoco tenga un guión como para tirar cohetes, ya que para lo que en si nos cuenta, le sobra metraje a destajo)
 
Cual si se creyera un dios, James Cameron nos presentó en la primera película algo visualmente nunca visto, y me imagino que su idea es profundizar en todo lo que puede ofrecer Pandora, más allá de lo que se vió en la entrega previa. De esa manera en esta el agua cobra una especial relevancia (tal y como el propio título indica), pero hay que tener paciencia porque no será tan inmediato como uno pudiera pensar, aunque llegado el momento se disfruta cual si fuera un documental de la National Geographic pero ambientado en una civilización extraterrestre. Se repite (creo que con acierto) la moraleja ecológica de la historia, con un claro paralelismo al genocidio cometido por los seres humanos contra ciertos animales, en muchos casos por motivos irrisorios (normalmente por los supuestos beneficios médicos o mágicos de alguna parte del mismo, pero desaprovechando el resto y llevando la especie a la extinción) En resumen la secuela de Avatar luce muy bien en su apartado visual pero se EXCEDE sin motivo ni causa en su (al final) AGOTADORA duración.
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lunes, 12 de diciembre de 2022

SPIDERGWEN GHOST-SPIDER: EL AÑO IMPOSIBLE / BATMAN (TRES JOKERS y EL IMPOSTOR) / EL HOMBRE Y EL GATO vol.1 a 4

SPIDERGWEN GHOST-SPIDER: EL AÑO IMPOSIBLE

Me he leido de la biblioteca el segundo tomo de SpiderGwen Ghost-Spider ANTES que el primero... por si las moscas. Me explico: nunca se sabe cuando te va a tocar la lectura (o si podras leerlo, que también hay mucho "amigo de lo ajeno") por lo que me curé en salud y empecé por el segundo (ya que estaba disponible), dejando pedido el primero a la espera de cuando llegue mi turno. No hay mayor problema porque más o menos he podido ir siguiendo la continuidad del personaje, por lo que no me cuesta mucho rellenar los "huecos" que pueda tener dentro de su historia. Eso me ha ocurrido con este, donde veo a esta Gwen Stacy intentando volver a su ritmo de vida habitual tras lo acontecido en el tomo previo (y que, como he indicado, aún no he leido) titulado Spidergedón, con el cual ya me imagino que esté más o menos relacionado con la saga homónima que me leí en 2019 (reseñas por este enlace y por este otro

Como he citado antes, en este segundo volumen asistimos a como esta Gwen intenta volver a la normalidad dentro de su mundo, aunque con el problema de haber estado en prisión y sobretodo de que su identidad secreta ya no lo es, con lo cual se le plantea dificil eso de intentar conciliar sus dos identidades. Se encontrará con unas cuantas problemáticas, tanto con máscara (su simbionte no va muy fino, el Hombre-Lobo y el Chacal son villanos que aparecen por aqui con una mayor o menor trascendencia, etc.) como sin ella (la relación con sus más allegados), que resultan entretenidas, desarrollándose paulatinamente de forma adecuada, destacando (¡como no!) el último número incluido en este tomo, donde de la manera más natural queda definido su nuevo nombre clave (Ghost-Spider) que yo aún no sabía como había surgido. En resumidas cuentas un tomo entretenido que desarrolla bien su esquema argumental básico.

BATMAN: TRES JOKERS

A veces tanto superhéroes como villanos están tan presentes por todas partes (bien sean comics propios o ajenos) que uno pensaría si tienen clones encargándose de lo que a ellos no alcanzan para cumplir con todo (bueno, la ironia con Spiderman se convirtió en una certeza) Pero en referencia al universo de Batman, resulta que ha descubierto que el Joker no es una persona sino que son tres (de ahi su ubicuidad), y en esta serie limitada de tres números, todos ellos incluidos en este tomo, vemos como Batman les sigue la pista, con la ayuda de Batgirl (afectada por el Joker en el pasado cuando, como Barbara Gordon, la dejó en una silla de ruedas en La broma asesina) y Capucha Roja (bajo cuya máscara está Jason Todd, afectado por el Joker en el pasado cuando, como Robin, se le dió por muerto tras Una muerte en la familia) Con un entretenido guión de Geoff Johns (que se centra en mostrar como afectó emocionalmente la intromisión en el pasado del Joker en las vidas de Batman, Batgirl y Jason Todd), el conjunto se ve realzado con el notable apartado gráfico de Jason Fabok, más allá de las discrepancias sobre la coherencia de lo que narra respecto a la continuidad.

BATMAN: EL IMPOSTOR

En muchas ocasiones los comics situados fuera de la continuidad suelen ser mejores que los otros porque disponen de una mayor libertad creativa, sin tener que ceñirse a ciertos hechos preestablecidos, siendo en ese apartado donde podría estar este Batman: El impostor que me he leído de la biblioteca, disfrutándolo bastante. Tampoco es que descubra nada nuevo, porque se centra en los primeros tiempos de Bruce Wayne ejerciendo como Batman, arrastrando este muchos problemas psicológicos por haber sido testigo del asesinato de sus padres. Por entonces se le toma por un justiciero algo perturbado (acertado lo de incluir por ello a Leslie Thompkins), con lo cual cuando surge un misterioso impostor que se hace pasar por él, pero con resultados mortales, queda algo difusa la frontera moral entre si Batman mata o no (tema que siempre ha quedado según cada guionista, aunque normalmente prevalece que no) Con un correcto guión de Mattson Tomlin, centrado más en el apartado psicológico de Batman, y con un destacable dibujo de Andrea Sorrentino, aunque en algunos (pocos) momentos la narración no sea muy fluida, el resultado global es tan entretenido como recomendable.

EL HOMBRE Y EL GATO vol.1 a 4

Me decanté por este manga porque la premisa me parecía tan sencilla como tierna: ni más ni menos que lo que su título promete, la historia entre un hombre y un gato, y como consiguen completarse respecto a sus carencias tanto uno como el otro, con el mensaje implícito de que lo mejor de todos se encuentra en nuestro interior. Por un lado está Fuyuki Kanda, un señor mayor ya viudo (que a medida que avanza la historia sabremos que era un famoso pianista) que compensa su soledad con Fukumaru, un gato adulto algo rechoncho en el que nadie se fijaba, hasta que Fuyuki lo adquirió. La obra se centra en todo tipo de anécdotas con las que muchos de los que hayan tenido un felino en casa como mascota se sentiran identificados, y de manera tan sencilla como emotiva nos va narrando como en muchas ocasiones la felicidad se encuentra en los detalles más insignificantes, lo que se demuestra en la mutua felicidad emocional entre humano y felino tan solo por estar juntos. Sin duda un manga de esos que emocionan al que tendré que irle siguiendo la pista porque de la biblioteca me he leído los cuatro primeros volúmenes, pero la serie aún no ha concluido.

viernes, 9 de diciembre de 2022

PINOCHO DE GUILLERMO DEL TORO, una genial obra de animación

Cuando se estrenó la adaptación de Pinocho de Matteo Garrone ya cité lo que por aquel entonces iban a ser los futuros proyectos de Robert Zemeckis y Guillermo del Toro: dos adaptaciones del popular clásico de Carlo Collodi, siendo el primero en acción real bajo el amparo de la Disney, y como remake del clásico animado de la misma; mientras que el mexicano optó por la animación stop-motion. En el caso de Zemeckis se estrenó en la plataforma Disney Plus el pasado septiembre con unos resultados tan miméticos al original que se antoja una mera operación de marketing, dentro de esa moda que tiene Disney en los últimos años de realizar remakes en supuesta "acción real" (porque en muchos casos se llevan a cabo con animación CGI) de sus clásicos animados.

En una interesante jugada con la clara intención de que pueda competir en la próxima temporada de premios, el Pinocho de Guillermo del Toro se estrenó de manera limitada en cines el pasado mes de noviembre, para posteriormente estrenarse en la plataforma Netflix este mes de diciembre. Ha sido una decisión parecida a la realizada también por Netflix con la secuela de Puñales por la espalda, que la mencionada plataforma estrenará el 23 de diciembre, pero que pude ver en un pase de prensa previo. En el caso de esta película de Guillermo del Toro codirigida por Mark Gustafson, no he tenido esa suerte y bien que lo lamento, porque su versión de Pinocho es UNA OBRA MAESTRA visual que se merecía sin duda alguna el estreno en salas, y que se posiciona sin problemas como uno de los mejores films del año.

De hecho en su aspecto visual no puedo achacarle ningún tipo de problema a este Pinocho de Guillermo del Toro, porque se nota el cariño, el esmero y el extremo cuidado con el que se ha realizado esta excelente película de animación en stop-motion, cuidando cada detalle en un trabajo de artesanía digno de todas las alabanzas. Al igual que Geppetto insufla vida a Pinocho, los responsables de este film (porque aunque Del Toro se lleve los méritos en el título, sería injusto olvidar a Gustafson) consiguen dotar de alma, de sentimiento y de vida a todos y cada uno de los personajes de esta emotiva adaptación, quizás no apta para toda la infancia (los más pequeños pueden no acabar de entenderla, aunque les entretenga en mayor o menor grado su acabado visual) pero desde luego que si recomendable para todos los públicos. Y es que con este film Del Toro vuelve a terrenos conocidos para él, ya explorados antes en títulos como El laberinto del fauno, contraponiendo la fertil imaginación infantil frente a la intransigencia totalitaria.

La obra original de Collodi vió la luz en 1883, en una sociedad muy diferente a la actual (por lo que la historia no era tan dulcificada como versiones posteriores nos han hecho creer), pero el responsable de La forma del agua traslada la acción a la década de los años cuarenta, en una Italia fascista que vivia la ascensión de Mussolini. Eso conlleva que en sus primeros minutos veamos aqui como Geppetto tiene un hijo llamado Carlo (con evidente homenaje al autor de la obra original en su nombre) que muere durante un bombardeo, lo que lleva a que su progenitor se hunda en el alcoholismo. Tiempo después, en una de sus habituales borracheras, cortará un tronco (en el que vive el grillo Sebastián, narrador de la historia) y tallará una marioneta de niño, a la que insuflará vida algo así como una hada, que se apiada de Geppetto y espera de esa manera darle esperanzas y motivos para seguir viviendo. Pero este Pinocho resulta una criatura tan inocente (desconoce en inicio las normas más básicas) como temida (cuando lo ven por primera vez lo tildan de criatura del demonio)

A partir de ahi veremos un intenso periplo de Pinocho, que le llevará desde el abuso que sufre a manos del codicioso conde Volpe, hasta el ser llevado a un campamento militar infantil por algo así como el magistrado del pueblo, que lo ve como un aliciente para las jóvenes tropas por su invulnerabilidad. Pese a los evidentes cambios sobre la base original, los momentos más icónicos del relato permanecen, si bien otros se modifican, como el de la transformación en burros de los niños desobedientes, que en este caso sería la transformación en "buenos" soldados de los niños obedientes (según el régimen fascista), lo que trastoca la versión original, pero cuyo alegato a la insumisión lo hace igualmente válido, aunque tenga sus consecuencias. El único punto donde quizás cojearía (levemente) este film sería en unas canciones que, aunque no molestan, no acaban de cuadrar del todo con el tono general y podrían haber sido prescindibles.
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jueves, 8 de diciembre de 2022

GRUPO DE APOYO PARA FINAL GIRLS / OJO DE HALCÓN: CAIDA LIBRE / ROBIN Y BATMAN / AMBASSADOR MAGMA (y una minireseña)

GRUPO DE APOYO PARA FINAL GIRLS

Desde que descubrí al autor Grady Hendrix me he leido casi todo lo suyo que encontré por las bibliotecas (me falta El exorcismo de mi mejor amiga, de la que he visto la película), hasta que hace unos meses ví esta obra en una librería, estando atento para cuando entrara en las bibliotecas. Ya la he leido y tengo que admitir que Grupo de apoyo para final girls es tanto una novela trepidante como un afectuoso homenaje a las películas slasher, esas que nacieron con Psicosis de Alfred Hitchcock y que alcanzaron fama en sagas como Viernes 13, La noche de Halloween, Pesadilla en Elm Street, Scream o La matanza de Texas. Lo de Final girl se refiere a la única superviviente después de que el psicópata de turno haya asesinado a casi todos los demás, y esta novela parte de la suposición de que las franquicias citadas se crearon basadas en hechos reales, y las final girls de los mismos se reunen en un grupo de apoyo no muy bien avenido... hasta que una de ellas es asesinada, empezando de nuevo la pesadilla ya que parecen estar en el objetivo de alguien pero... ¿quien? Una novela muy entretenida y de adictiva lectura, que entusiasmará sobretodo a los fans del slasher.

OJO DE HALCÓN: CAIDA LIBRE

No voy a decir nada nuevo si digo que el mejor Ojo de Halcón que he leido en los últimos años es el de Matt Fraction y David Aja. Parte de aquello se intentó traspasar a su serie para Disney Plus que se vió a finales del año pasado, con unos resultados correctos en el conjunto (sobretodo por el carisma de la Kate Bishop encarnada por Hailee Steinfeld) pero algo insatisfactorios en cuanto al personaje. Y es que te lees un comic como este Ojo de Halcón: Caida libre y te imaginas a un personaje más dicharachero que el encarnado en imágenes por Jeremy Renner, si bien el presente tomo se centra en el regreso de Ronin (una de las personalidades enmascaradas de Clint Barton), y las suspicacias que eso levanta en el resto de superhéroes, por más que el protagonista niega por activa y por pasiva que sea él. Entremedio de una trama bastante entretenida, Ojo de Halcón se cruzará en estas páginas con un montón de personajes del universo Marvel (tanto héroes como villanos, en el artículo final los citan porque algunos de ellos son más conocidos que otros), en un correcto guión de Matthew Rosenberg que se ve beneficiado del acertado apartado gráfico a cargo de Otto Schmidt.

ROBIN Y BATMAN

Nada más leer el título de este comic te piensas que han invertido los nombres de los protagonistas, ya que lo usual es que el del Caballero Oscuro vaya por delante del de su púpilo más conocido, pero eso en este caso tiene la explicación de que Robin y Batman le da más importancia al primero que al segundo. Eso se debe a que se centra en los orígenes de Dick Grayson como el primer Robin, y la conflictiva relación emocional que tenía por aquel entonces con un Batman que por un lado lo quiere entrenar de forma estricta como compañero de andanzas, mientras que como Bruce Wayne quiere que Dick Grayson sea su emblemático hijo adoptivo. En los apenas tres números de esta obra el guión de Jeff Lemire, realzado por el apartado gráfico de Dustin Nguyen, sirve no solo para mostrar el enésimo origen de Robin (aqui relacionado con Killer Croc, en un giro que me llevó a recordar a La forma del agua, aunque en esta ocasión con un monstruo villano), sino para ver también como este inicial Robin conoció a los sidekicks más populares del resto de miembros de la Liga de la Justicia. Un buen comic que incluso se queda corto, dando la sensación de que podía haberse expandido más.

AMBASSADOR MAGMA

Siempre he mostrado mi predilección por las obras de Osamu Tezuka, denominado el dios del manga por lo mucho que ayudó a su expansión y difusión, con una obra prolífica y variada donde tocó todos los géneros. En este caso Ambassador Magma entra dentro de la ciencia-ficción con una historia publicada entre 1965 y 1967 donde a Tezuka le ayudaron Satoru Inoue y Kazuyoshi Fukumoto... hasta que llegó un momento que le sustituyeron por completo, siendo ese el motivo de que el presente tomo acabe con lo que se podría denominar como un final abierto, pero que en si engloba la parte de Tezuka. La historia tiene detalles de todo tipo: desde invasiones alienígenas que por momentos pueden recordar a La invasión de los ultracuerpos hasta viajes a la prehistoria, o robots gigantes que parecen un anticipo de los Transformers, todo ello con elementos cósmicos y héroes íntegros con los que empatizar. Este tomo completa toda la saga del título en la que trabajó Tezuka con otra historia corta suya (y de temática juvenil) del todo ajena a la previa. Ambassador Magma fue tan exitosa que incluso tuvo una adaptación tokusatsu (en acción real y con efectos especiales) y otra en anime.

MEMORIAS DE UN HOMBRE EN PIJAMA: EL INTEGRAL

Me he leído también de la biblioteca el tomo recopilatorio Memorias de un hombre en pijama: El integral de Paco Roca, que engloba el material que ya me leí en su día en los tomos (también gracias a la biblioteca) Memorias de un hombre en pijama, Andanzas de un hombre en pijama y Confesiones de un hombre en pijama a lo que se añade material inédito y realizado para esta edición, conformando una manera de tener en una misma obra todo el material de este alter-ego del propio autor editado previamente en los títulos citados.

domingo, 4 de diciembre de 2022

NOCHE DE PAZ, navidades con SANTA McCLANE (crítica sin spoilers)

Las navidades son unas fiestas agradables para unos y odiosas para otros. Desde mi punto de vista, más coincidente con el segundo grupo que con el primero, los que las disfrutan con ilusión son los que pueden celebrarlas con reuniones familiares (cumpliendo con los estereotipos pertinentes), y sobretodo aquellas en las que hay niños pequeños, que aún mantienen esa ilusión infantil por Papa Noel, Santa Claus, San Nicolás o como cada uno se tercie de llamarlo (a lo que luego añadir la llegada de los Reyes Magos
 
Pero luego está la versión de los que vemos estas fiestas como una mera excusa para fomentar el consumismo más exacerbado, con campañas de caridad para los necesitados (que te hacen preguntarte si esa pobre gente sólo come en estas fechas, porque el resto del año ni se acuerdan de ellos como ahora), banquetes pantagruélicos para comer hasta reventar (como si esto fuera una competición para alcanzar el mayor empacho) y anuncios de (sobretodo) perfumes, que parece que la gente sólo tenga la obligación de oler bien por estas fechas. 

En un punto intermedio entre ambas tendencias quedan productos como esta Noche de paz, cuyo título original es Violent night (más explícita en cuanto a lo que ofrece este film), que vendría a ser una "jocosa" variación de la típica canción navideña O Holy night. Dirigida por Tommy Wirkola, responsable entre otras de Zombis nazis o Hansel y Gretel cazadores de brujas, y protagonizada por David Harbour (Stranger Things o el Hellboy de Neil Marshall)... ¿que es Noche de paz?

Imaginemos una película navideña simpática como fue Solo en casa, y mezclemos eso con el film de acción navideño más emblemático de la década de los ochenta (Jungla de cristal, de título original Die hard), y el desaforado resultado final bien podría ser perfectamente algo como esta película. De hecho en este film se hace referencia a ambos títulos, cogiendo del primero las trastadas contra los intrusos (en este caso algo más sangrientas), y del segundo un símil de la relación que se establecía por radio entre John McClane (Bruce Willis) y el sargento Al Powell (Reginald VelJohnson), en este caso entre el Santa Claus encarnado con tremendo desparpajo por un divertido David Harbour y la jovencita Trudy Lightstone (Leah Brady), que pese a que le digan en cierto momento de tensión que no existe ese personaje tan navideño, tiene fé inquebrantable en él y esperanza de que les solucionará el problema.

¿Y cual es el incidente que lleva a este Santa Claus ha comportarse cual si fuera el protagonista de la franquicia Jungla de Cristal? Muy sencillo: al principio nos lo presentan como el verdadero Santa Claus, pero uno cansado y amargado de que el espíritu de la navidad se haya transformado en una mera cuestión mercantilista. Me parece muy ilustrativo cuando le indican, en su primera escena en un bar, que la mayor ilusión es la sonrisa de un niño, y él contesta que eso dura dos segundos antes de ir al siguiente regalo, ya que los inflan a obsequios haciendo que no sepan valorar lo que tienen. Cuando enmedio de su (agotadora) labor pasa por la mansión Lightstone, se encuentra con que unos mercenarios han secuestrado a toda la familia. Tanto los villanos como sus víctimas ejemplifican una desmedida codicia, los primeros por la fortuna familiar pero los segundos disputándose la herencia de la matriarca del clan.
 
Pero la esperanza está en la pequeña Trudy, totalmente ilusionada con la llegada de Santa Claus y a quien pedirá ayuda, mediante un walkie-talkie de juguete, para intentar salvar la situación. Al principio Santa tendrá sus dudas, pero poco a poco lo veremos cual John McClane, dando buena cuenta de los asaltantes de las formas más sangrientamente navideñas. Y es que este Santa, como él mismo revelará, tiene sus orígenes en la antigua mitologia nórdica, comentando como por aquel entonces tenía un martillo similar al de Thor, con el que machacó muchos craneos, por lo que no tiene ningún problema en enfrentarse con los "chicos malos". El resultado es una película gamberra, que en todo momento tiene conciencia del disparate que plantea (siendo entretenida justo por ello), pero cuyo único handicap sería la (no siempre) acertada cohesión entre el citado tono bárbaro y las ñoñerias típicas de estas fiestas.
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